La Guardia Civil ha desarticulado en la provincia de Barcelona una organización criminal dedicada al narcotráfico internacional, en una operación en la que han sido detenidas 10 personas y se han decomisado, 306 kilos de marihuana, 266 kilos de hachís y un arma de guerra tipo AK-47 (kalashnikov).
El grupo criminal utilizaba camiones de mercancía legal para ocultar y trasladar grandes cantidades de droga a Europa. Además de los kilos de droga decomisados, los agentes intervinieron también 2.243 plantas de marihuana y armas de fuego, entre ellas un AK-47 que se ocultaba en un camión que viajaba a Italia.
La operación, denominada Tatare, se inició en junio de 2024 y culminó el pasado 24 de octubre con la detención global de diez personas y el desmantelamiento de una compleja infraestructura de producción y tráfico de drogas en las localidades barcelonesas de Igualada, Òdena, Jorba y Mediona.
La investigación comenzó cuando el Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) de la Unidad Orgánica de Policía Judicial (UOPJ) de la Guardia Civil de Barcelona tuvo conocimiento de un grupo que estaba vinculado a la producción y distribución de marihuana a gran escala.
Este grupo utilizaba naves industriales acondicionadas para el cultivo de marihuana en zonas rurales de difícil acceso, lo que dificultaba las labores de vigilancia de los agentes.
En julio de 2024, tras semanas de investigación, los agentes detectaron un cargamento oculto en un camión con destino a Italia, que fue interceptado en La Jonquera por agentes de la Guardia Civil de la comandancia de Girona.
En el camión se encontraron unos 300 kilos de marihuana envasada al vacío, 266 kilos de hachís y un arma de guerra tipo AK-47, en perfecto estado de funcionamiento, junto a un sistema de ocultación sofisticado que hacía difícil localizar la droga.
Los dos conductores del camión fueron detenidos en ese momento.
Con esta primera intervención, los investigadores pudieron trazar un entramado de empresas que operaban para dar cobertura y logística a las actividades de tráfico de drogas.
Una de estas empresas, localizada en Igualada y dedicada supuestamente al comercio de productos relacionados con el cannabis, servía como pantalla para facilitar el transporte y la distribución de grandes cantidades de droga.
En octubre de 2024, la Guardia Civil inició una segunda fase de la operación realizando un total de ocho registros en viviendas y naves industriales, desmantelando dos plantaciones interiores con sofisticados sistemas de ventilación, iluminación y fertilización para mantener el crecimiento intensivo de las plantas de marihuana.
En esta segunda fase, se incautaron 992 plantas de marihuana, 1.251 esquejes (brotes jóvenes destinados a la propagación) y 736 gramos de hachís listos para su distribución.
También se intervino dinero en efectivo y varias armas en posesión de los detenidos, incluyendo una táser, dos defensas extensibles, munición de revólver y escopeta, que pudieron haber sido utilizadas para proteger las plantaciones.
Dada la elevada peligrosidad de esta organización criminal, la Guardia Civil activó para las entradas y registros a la Unidad Especial de Intervención (UEI), una unidad de élite especializada en operaciones complejas y situaciones de riesgo, que contó con el apoyo de otros grupos como el Grupo de Reserva y Seguridad (GRS), la Unidad de Seguridad Ciudadana (USECIC) y el Grupo Cinológico.
En esta segunda fase, la Guardia Civil arrestó al resto de narcotraficantes.