Elon Musk, dueño de Tesla y X (el antiguo Twitter), parece que ya no está tan contento con su adorado Donald Trump. Los aranceles que ha impuesto el presidente de EEUU al mundo entero le han costado a Musk 11.000 millones de dólares al caer sus acciones en bolsa. A otros colegas multimillonarios de Donald, que también pagaron un millón de dólares cada uno para poder asistir en primera fila a su investidura, les ha ido aún peor. Jeff Bezos, fundador de Amazon, perdió 15.900 millones de dólares, y Mark Zuckberg, fundador de Meta (WhatsApp y Facebook), 17.900 millones. Los ‘teslaadictos’ (miles de personas con abultadas cuentas corrientes) y los usuarios de Amazon y WhatsApp, es decir, el planeta entero, deberían hacer una colecta. Elon, Mark y Jeff dan penita. No vaya a ser que acaben en un comedor social.
Por ahora, el único que ha alzado la voz, si es que se puede decir así, ha sido Musk: «Espero que Estados Unidos y Europa puedan establecer una asociación muy cercana. Espero que se acuerde que tanto Europa como Estados Unidos deberían moverse hacia una situación de tarifas cero, creando efectivamente una zona de libre comercio. Esa sería mi esperanza, lo que espero que ocurra». Vamos, recuperar las buenas relaciones que se ha cargado Trump. Toda una enmienda al trumpismo. ¿Despedirá el ‘presi’ a su hasta ahora mano derecha?
