Ya está aquí el calor y, con él, los baños de sol en la playa o en la piscina. Hay que tomar las debidas precauciones, como utilizar un buen fotoprotector solar, y comprobaremos que ponernos un rato, ¡solo un rato!, al sol es un placer para el cuerpo y también para el espíritu.
Importantes beneficios
El sol es un excelente antidepresivo natural, que te carga de energía y de buen humor. También es imprescindible para sintetizar la vitamina D, combatir la osteoporosis, curar el acné, aumentar la transpiración favoreciendo la eliminación de toxinas y, además, su bronceado proporciona un aspecto muy favorecedor y saludable.
Tomar precauciones
Podemos dejarnos acariciar por el sol y disfrutar de sus cualidades, teniendo en cuenta ciertas consideraciones. Según como sea nuestro tipo de piel, podremos exponerla a la acción solar durante más o menos tiempo sin riesgo de que se queme.
Pieles hipersensibles
Suelen ser muy blancas y delicadas; la tienen los que lucen ojos azules o claros, rara vez de color marrón, o si tienen el cabello rubio o pelirrojo. Este tipo de piel se quema con mucha facilidad y se pone rápidamente roja. Aconsejamos: Sun Secure Blur Crema Mousse SPF 50+ de SVR. De factor de protección solar, protege de todo tipo de rayos UVB/UVA, visibles e infrarrojos. Ideal como base de maquillaje y protección solar, dos en uno.
Piel sensible
La piel sensible es aquella piel clara, con algunas pecas o manchitas; color de los ojos azul, verde o gris; cabello del rubio al castaño. Aconsejamos: Heliocare 360º Age Active Fluid SPF 50, de Cantabria-Labs. Es un fluido fotoprotector y ultraligero para prevenir y corregir los signos del fotoenvejecimiento. Con actividad avanzada frente a radiación UVA, luz visible y luz azul.
Pieles normales
Piel ligeramente dorada; ojos de color gris o marrón; cabello rubio oscuro, castaño o moreno. Este tipo de pieles no se suele quemar fácilmente con el sol. Aconsejamos: Starsun-Facial Cream SPF 50+ de Maystar. Protector solar vegano para el rostro, de textura nutritiva y rica. Formulado a base de jojoba y girasol con filtros orgánicos de nueva generación.
Mientras tomamos el sol, procuremos no estar siempre tumbados
Pieles resistentes
Son pieles poco sensibles y con buen color, llamadas mediterráneas; para los que tienen ojos negros o color marrón, cabello oscuro o negro. Rápidamente, se broncean y jamás se queman. Aconsejamos: Specials Protection UV50 Serum, de Dr. Grandel. Consiste de un suero de protección solar, protege la piel de la radiación UV y también de los radicales libres, ayudando a prevenir el envejecimiento cutáneo prematuro.
Consejos básicos
- Una exposición prolongada al sol puede producir deshidratación, quemaduras o alergias en algunas personas.
- Comencemos el día con un zumo de vitaminas: naranja y zanahoria a partes iguales. Recordemos que las vitaminas A, E y C favorecen la hidratación de la piel, potencian la producción de melanina y previenen el envejecimiento, neutralizando la aparición de los radicales libres.
- El sol en las horas centrales del día es más nocivo para la piel pues, al enviar sus rayos de forma vertical, la cantidad de radiaciones ultravioleta es mayor.
- Mientras tomamos el sol, procuremos no estar siempre tumbados. Es mejor caminar o hacer ejercicio, porque así se consigue un bronceado más uniforme.
- En caso de tener manchas o irritaciones, debemos protegerlas con un producto de efecto pantalla total en las zonas más localizadas.
- Consultemos a nuestro médico si estamos tomando algún medicamento. Algunos reaccionan ante el sol y pueden producir una pigmentación irregular o potenciar la formación de manchas.
- Además de hidratar la piel de forma superficial, el cuerpo necesita una dosis de hidratación interior en forma de líquidos, para reponer el agua perdida por la sudoración. Procurar beber agua fresca, no helada.
- Al final del día necesitamos hidratar y calmar la piel utilizando, después de la ducha, un producto especial after-sun.
