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El colorete, un toque de frescura

Un recurso casi mágico que ayuda a conseguir un destello de buena salud y vitalidad

15 marzo 2025 16:07 | Actualizado a 15 marzo 2025 16:37
Se lee en 5 minutos
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Si la cara ofrece un aspecto de cansancio y fatiga, puedes evitar esa mala imagen utilizando este cosmético, siempre que lo apliques correctamente y en la zona adecuada de tu rostro. De todos los productos de maquillaje, el preferido por especialistas y modelos es el colorete. No hay maquillador que no opte por el astuto toque de luz, color y aspecto saludable que pone un colorete sabiamente elegido y correctamente aplicado.

Todos los secretos

En teoría, averiguar el color idóneo y perfecto de colorete es fácil. Basta con imitar el color que el rostro toma cuando se ruboriza. Por ejemplo, después de hacer ejercicio.

-El acierto y el secreto de su uso están en la mezcla de colores. Para ello, juega con los colores hasta encontrar la gama personal que te siente bien. Ten por lo menos dos coloretes en tonos opuestos combinados. Algunas marcas los presentan en cajitas de dúo, para que puedas hacer mezclas insospechadas, permitiendo variar las intensidades, matizar y pasar de la transparencia de las mañanas a un color un poco más intenso para la noche. Al contar con dos colores, uno más claro y otro más oscuro, es ideal alternarlos según las estaciones del año (más intenso cuando el cutis esté bronceado).

-Si solo te aplicas colorete en las mejillas, busca el punto exacto donde colocarlo. Toma una toalla, mójala con agua caliente y aplícala en las mejillas. Observa el lugar donde la sangre afluye sobre la piel, allí es donde debes aplicar el colorete. Otra opción para saber cuál es ese lugar y color para el colorete es pellizcarte las mejillas: el tono del enrojecimiento natural te indicará donde encaminar la elección. Naturalmente, puedes apartarte un poco de este tono natural, pero no cambies de gama.

-Hoy el colorete no se limita solamente a las mejillas, se escampa a lo largo del cuello, sobre la barbilla, en el lóbulo de la oreja, sobre la frente, punta de la nariz y hasta en los hombros; allí donde se pueda captar la luz.

Aconsejo: Strobe Beam Liquid Blush de MAC. Consiste de un colorete líquido muy ligero de intensidad modulable. Permite controlar la intensidad gracias a los pigmentos que curvan la luz para conseguir una luminosidad multidimensional. Lo puedes usar para contornear, iluminar con un efecto glow al instante. Aporta a las mejillas una iluminación etérea, logrando una luz perfecta durante todo el día.

$!El colorete, un toque de frescura

-Si quieres que los ojos parezcan más brillantes, aplícate una pizca de colorete debajo del rabillo externo de cada ojo.

-El colorete en polvo puede aclararse aplicando un poco de polvos incoloros por encima.

-Los coloretes en crema deben fundirse sobre los pómulos, encima del maquillaje, pero debajo del polvo.

-No se puede desestimar la importancia de una buena brocha. Ha de ser grande, con lados biselados y de pelo natural de cerda de marta, cabra o poni.

Aconsejo: Las brochas Luxury Burgundy de Maiko. Están diseñadas con forma ovalada y capeada de fibras largas y suaves que permiten la aplicación de productos en polvo. Facilitando la aplicación ligera y localizada sin alterar los productos aplicados, gracia a sus fibras extremadamente suaves. Además son ideales para depositar la cantidad adecuada de los productos en polvo sin recargar la piel.

$!El colorete, un toque de frescura

-Hay que olvidarse de los aplicadores que incluyen los coloretes, prácticos para emergencias, pero inútiles a la hora de conseguir un buen resultado. La aplicación correcta pasa por mojar la brocha en el colorete y después, siempre soplar sobre la misma o retirar el exceso con un suave golpecito. Es un detalle importante, pues si cuando se lleva el pincel al rostro se deposita demasiado producto, se corre el riesgo de dejar manchas. No hace falta más que rozar la piel con suaves gestos circulares, nunca en línea recta, manteniéndose en los márgenes donde se produciría el rubor natural.

-No se puede modelar un rostro ni cambiar su forma mediante el colorete, Pero se puede corregir con toques maestros y precisos en el sitio adecuado de forma armoniosa. En caso de no hacerlo correctamente sólo se conseguiría un resultado totalmente antinatural.

-Cuando el problema es un exceso de colorete y el consiguiente aspecto de muñeca pepona, hay solución. Para reducir la intensidad de color, nada como aplicar una capa de polvos traslúcidos por encima. Es más efectivo que intentar eliminarlo con un pañuelo de papel.

-Los coloretes brillantes o satinados dan más volumen, por lo que son ideales para agrandar los pómulos pequeños o poco marcados.

-Al utilizar el colorete, procura aplicar poca cantidad, insistiendo en los movimientos para extenderlo e intensificando gradualmente hasta obtener el matiz deseado. Así podrás modelar y esculpir las mejillas y corregir algunas imperfecciones del rostro.

-Los coloretes se presentan en diversas formas: polvos, crema o gel. Además de los iluminadores, como complemento final para da esplendor y acabar de modelar la cara.

-Los tonos de colorete adecuados dependiendo de cada piel:
Piel oscura: te irán bien los colores canela, ámbar y ciruela.
Piel blanca: ámbar y una gama de rosas más bien pálidos.
Piel aceitunada: rosa fuerte y una gama de tostados.


Correcciones con colorete:

El colorete da relieve a los pómulos y realza las facciones del rostro.
El look y la forma del óvalo pueden cambiarse aplicando el colorete y con ciertos toques de color para dar luz. Puedes suavizar los rasgos aplicando colorete en la parte hundida de los pómulos mientras los resaltas con toques luminosos por encima. Así se logra dar un buen aspecto.

Las mejillas ideales son altas y ligeramente más altas que el maxilar.
Pero no te preocupes si no tienes unos pómulos elevados. La perfección es solamente un ideal al que acercarse. Recuerda que los tonos claros dan relieve y los oscuros profundidad.

El rostro ovalado
Es más ancho en la parte de las sienes y más estrecho en ya parte de las mandíbulas. Es el ideal.
Acentúa los pómulos extendiendo el colorete más claro desde el centro de las mejillas claro hacia las sienes.
Si quieres remarcarlos con más intensidad, puedes usar un segundo colorete, más oscuro que el primero, aplicándolo debajo del pómulo.

El rostro redondo
Se ensancha mucho más en la zona de los pómulos y es casi igual de largo que de ancho.
La aplicación correcta del colorete es en forma de V. Procura empezar en la parte hundida del pómulo y difuminando hacia las sienes.

El rostro cuadrado
Es el que aproximadamente, tienen el mismo ancho la frente, las mejillas y la mandíbula. Aplícate el colorete, remarcando y acentuando las mejillas.
Se aplica el colorete sobre la parte hundida de las mejillas hacia el centro del pómulo.
Igualmente, aplícalo a ambos lados de la frente y en la mandíbula, pero bien difuminado.

El rostro triangular
Es el más ancho en las mandíbulas y más estrecho en la frente.
Se aconseja aplicar el colorete sobre el pómulo llevándolo hacia las orejas.

Los polvos de sol

Los polvos de sol no son exclusivos del verano. Durante los meses de bronceado sirven para potenciarlo, y en invierno son excelentes aliados para animar la palidez de estos meses. El secreto está en elegir una intensidad más clara o más oscura, dependiendo del tono de la piel.

La meta final de los polvos de sol no es recrear un bronceado tropical, sino aportar calidez al rostro. Esto se consigue aplicándolos con mano ligera y pasando la brocha de forma muy suave por el rostro, comenzando en las zonas más altas, es decir, centro de la frente y barbilla, pómulos y puente de la nariz. Esto se consigue trazando primero una cruz con el producto:

Desde la raíz del pelo hasta la barbilla y de sien a sien. Después se extiende, procurando siempre ser parco con la cantidad de polvos. En caso de tener la piel muy seca, nada como las fórmulas en crema o en barra.

Aconsejo: Terracotta Light de Guerlain. Una colección exclusiva de los polvos legendarios. Están compuestos por un 96% de ingredientes de origen natural, su textura se funde al instante con la piel, gracias a una armonía de tonos que se mezclan a la perfección. Enriquecidos con miel de flores marroquíes, que preservan la hidratación de la piel con una sensación imperceptible.

$!El colorete, un toque de frescura

-Los polvos faciales darán a tu piel una textura fina y aterciopelada, proporcionando un suave acabado mate, con toda la transparencia de la porcelana, unificando el tono de la piel y además, ayudando a fijar el colorete.

Aplícalos sobre la cara y cuello con ligeras presiones para lograr su adherencia.


Aconsejo: Camélia Futura de Chanel.
Consiste de un trío coloretes en acabado mate con tres tonos: rosa suave, rosa coral y albaricoque. La tez se realza, los pómulos se subliman y las zonas prominentes del rostro se iluminan. Para conseguir un efecto buena cara, mezclar los tres tonos y aplicarlos con delicados toques en los pómulos.

$!El colorete, un toque de frescura

-Los pasos para no parecer una muñeca:
1.- Frotar el colorete con la brocha.
2.- Pasar la brocha por la palma de la mano para eliminar el exceso de

color.
3.- Extenderlo cuidadosamente sobre las mejillas.
4.- El secreto está en usar poco color y mucha difuminación.

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