Un ciudadano marroquí que atacó a dos vigilantes en la estación de tren de Segur de Calafell ha sido absuelto. Pero no porque no atacara al personal de seguridad, sino por estar diagnosticado de esquizofrenia paranoide y trastorno por abusos de sustancias.
Así lo decidió el Juzgado de lo Penal de Tarragona y posteriormente la Sección Segunda de la Audiencia Provincial, que ha rechazado el recurso de apelación del procesado.
A pesar de la absolución de dos delitos leves de lesiones, otro en grado de tentativa y uno de daños, se le impone tratamiento médico externo por seis meses por el delito de daños. Asimismo tendrá que indemnizar a cada vigilante con 300 euros por las lesiones y a Renfe con 2.293 euros por los daños. El acusado tiene antecedentes penales.
Los hechos
Sobre las 21.00 del 4 de agosto de 2016 estaba en un tren que parado en uno de los andenes de la estación de Segur, en sentido a Sant Vicenç de Calders. Cuando fue requerido para que abandonara el tren, el procesado golpeó a uno de los vigilantes causándole una contusión en el antebrazo, de la que tardó en recuperarse diez días.
Después empujó al otro vigilante contra la barra de hierro de la puerta del tren, causándole lesiones en la zona lumbar. Cuando el hombre ya estaba en la estación, les lanzó una piedra, que impactó contra el cristal de la puerta de acceso al interior de la instalación.
Recurso
En el recurso, el acusado negó ser autor de la agresión argumentando que la identificación fue mediante la recopilación de los datos de los Mossos, algo que no se ratificó en el juicio. En la sentencia se dice que uno de los vigilantes identificó al sospechoso, que tenían retenido hasta la llegada de los Mossos.
Aunque la detención se materializó al día siguiente ya que el sospechoso tuvo que ser trasladado en ambulancia hasta un centro médico.