Anatoly Shariy lleva mucho tiempo fuera de su Kiev natal. Periodista, político, videoblogger... son algunos de los atributos que acompañan a este ucraniano de 43 años en la escena de la actualidad de estos días, en plena guerra entre Rusia y Ucrania.
La semana pasada él mismo difundió su propia noticia en su perfil de Facebook. Subió un vídeo de un escrache donde él era la víctima enfrente de la puerta de su casa, en una urbanización de Roda de Berà. Allí, una quincena de hombres con banderas de Ucrania le esperaron a la puerta para recriminarle su postura en el conflicto.
Los hechos ocurrían minutos antes de las 20 horas del jueves día 25. Los manifestantes todos eran de fuera de Roda de Berà, según han explicado fuentes conocedoras del caso al Diari. Algunos viajaron desde Girona, otros del sur de la provincia de Tarragona y también había manifestantes de Barcelona. Ninguno de los presentes formaban parte de los 32 refugiados empadronados en la localidad durante este mes.
Y todos los participantes de la protesta eran hombres jóvenes o de mediana edad (lo que indica que viven aquí y no serían refugiados, ya que solo se permite la salida de mujeres y niños).
Rebajar la tensión
El vigilante de seguridad, que estaba de guardia en aquellas horas del jueves, el propio Shariy y una patrulla de la Policía Local lograron rebajar la tensión. Intercambio de palabras, gritos y alguna patada del propio Shariy que no se amedrantó ante los manifestantes. El escrache no tuvo mayor recorrido.
Luego aparecieron Mossos y Guardia Civil. Los primeros identificaron a los presuntos autores del escrache y abrieron diligencias informativas (enviaron informe al Juzgado de Guardia de el Vendrell). Nadie quiere hablar más del tema. Pasan de puntillas. Argumentan que es una situación «delicada» pensando en las penurias de los refugiados. A nadie se le escapa que la ideologia del vecino de Roda de Berà contrasta con la postura europea a la invasión rusa de Ucrania.
Sus argumentos ideológicos reflejan una antítesis de la visión occidental. Y ello ya se tuvo en consideración hace semanas en el Ayuntamiento de Roda de Berà para que los refugiados y este videoblogger no tuvieran oportunidad de encararse o terminar una discusión de forma impredecible.
Después de Lituania
El Ayuntamiento de Roda de Berà, al igual que la Guardia Civil y Mossos d’Esquadra sabían de Anatoli Shariy desde hacía tiempo. Nadie lo confirma, pero a nadie se le escapa que una casa con cámaras de vigilancia y personal de seguridad permanente las 24 horas es suficientemente llamativo para indagar el porqué de tanta precaución.
Anatoly Shariy vive en una casa de lujo de Roda de Berà desde 2019, aunque está empadronado desde hace pocos meses. Salió de su Kiev natal hace una década y se mudó en Lituania, tras conseguir un asilo de la Unión Europea.
Obtuvo un asilo de cinco años en Lituania y al finalizar su visado viajó a España, donde encontró una casa en Roda de Berà. Aquí vive junto a su familia. Además de periodista, hizo sus pinitos políticos en 2019 y logró que su partido tuviera representación en ciudades de Ucrania. Sus ideas se consideran prorrusas y algunas de las evidencias es que ha mostrado un mapa de su país sin Crimea, la península que se anexionó Rusia en 2014.
Según recogen diferentes medios y se ha explicado por redes sociales, Anatoli huyó de Ucrania en 2012 acusado de varios delitos. Él se defiende que fueron acusaciones infundadas por las investigaciones de una posible corrupción del gobierno del presidente Víktor Yanukóvich.
También fue crítico con los gobiernos de tendencia occidental que sucedieron a Yanukóvich. Y en 2021, el Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) –Volodímir Zelenski ya era el presidente—, lo acusó de alta traición y discurso de odio y afirmó que tenía pruebas de que estaba a sueldo de Moscú. Como no se presentó a declarar, está en busca y captura desde entonces.
Y en esta busca y captura entrarían las amenazas que ha sufrido en su casa de Roda de Berà, donde aparecieron pintadas e incluso un retrete que le dejaron unos encapuchados. El caso sigue sin resolverse.
Preguntado a Mossos y Guardia Civil sobre Anatoly Shariy, no hay respuesta. Sí es cierto de que la presencia policial en la zona donde reside Anatoli y su familia se ha incrementado por razones de seguridad. Y también es verdad que nadie desea que la presencia de este vecino origine un conflicto con los refugiados acogidos en la localidad.