Álex Martí toma Reus en una final reñida contra Ugo Blanchet

La lluvia no evitó que Álex Martí y Ugo Blanchet ofrecieran un auténtico espectáculo en la final del Torneig Internacional de Tennis ITF World Tennis Tour Autolica Mercedes Benz del Monterols. El tiempo retrasó el inicio del partido, pero, cuando el cielo dio una tregua, todo arrancó con normalidad. Además, el duelo fue especialmente reñido, con un set para cada uno en las dos primeras mangas y un ‘tie-break’ en el set definitivo, que cayó del lado catalán. 

A pesar de la victoria final, el inicio de Álex Martí fue para olvidar. El francés le endosó un 0-3 de primeras que dibujaba una final desigual. Los errores de Blanchet consiguieron que Martí recortada distancias (2-3), pero el galo continuó siendo un martillo. Su saque era prácticamente inquebrantable y siempre tenía una respuesta a los golpes del catalán. Cuando éste subía a la red, un globo del francés le dejaba sin opciones. Las dejadas de Blanchet y sus constantes subidas también crearon dolores de cabeza a Martí. En una de esas excursiones a la red, Blanchet dejó el set visto para sentencia con el 2-5. Aunque Martí se resistió a perder el último juego, un golpe duro paralelo permitió a Blanchet sumar el primer set.

Cambio de rumbo

Entre la primera y la segunda manga, atendieron a Álex Martí por unas molestias en el pie. Con el nuevo vendaje, el catalán borró por completo la imagen que había dado en el primer set. 

El catalán salió enchufado. Consiguió el primer juego con solvencia e incluso contó con tres puntos de rotura que desperdició. La mejora era evidente. Las subidas del francés, que siempre terminaban en puntos para el galo, ahora tenían un desenlace distinto con globos a los que Blanchet no llegaba. El catalán se crecía incluso ante el potente servicio de su rival. Mientras que el otro se hundía a cada pelota que no alcanzaba y a sus constantes errores no forzados. Precisamente, una doble falta del galo hizo subir el 6-2 que empataba la final.

Hasta el momento, se habían observado dos sets completamente distintos. El primero tuvo un claro dominio francés, mientras que, en el segundo, Martí resurgió y tiró de garra para que Blanchet se ahogara en un mar de dudas. Faltaba por ver quién iba a decantar la balanza en la manga definitiva. 

Desde el principio, ninguno de los dos finalistas quiso dar su brazo a torcer. Martí salió como una bala anotándose el primer juego sin permitir ningún punto del galo. Blanchet respondió con el empate. Una dinámica que se mantuvo hasta el 3-3. 

Entonces, el francés consiguió meter el punto de rotura tras un juego largo. Blanchet movió a Martí de esquina a esquina de la pista hasta que encontró el espacio para un punto que podía ser definitivo. 

Lejos de amedrentarse, Martí también rompió el saque de su rival y, posteriormente, consiguió un 5-4 a favor en el que Blanchet le puso contra las cuerdas.  El catalán estuvo cerca de perder otra vez su saque, pero contrarrestó los tres posibles puntos de rotura del galo, ganándose la complicidad del público. 

Ante esta igualdad, el duelo se fue al ‘tie-break’. Martí, que había ido comiéndole terreno a Blanchet, no dio ninguna opción a su oponente. El 4-1 con un ‘ace’ consolidaba la tendencia del catalán, que no perdonó. El 7-3 en el ‘tie-break’ cerró una final de dos horas y cuarenta minutos con el triunfo definitivo de Álex Martí (3-6, 6-2, 7-6), su segundo trofeo internacional.