Encontrarse cara a cara con el Alzheimer nunca es fácil. Ni para el enfermo, ni para los familiares. En el caso de Albert Roda el ‘choque’ fue hace ocho años. Su madre, enfermera de profesión, empezó a tener problemas para reconocer espacios en los que llevaba más de dos décadas trabajando. Con el diagnóstico en la mano, la familia encaró la nueva situación buscando un sitio en el que pudieran afrontar la enfermedad degenerativa de la mejor manera posible. Desde hace unos años ese sitio es la Fundación Rosa Maria Vivar en Reus.
«Es el único centro específico de la provincia para pacientes con Alzheimer, con unas instalaciones adaptadas para promover proyectos como la Unitat de la Memoria y que son referencia a nivel nacional», explica Roda. Por ese beneficio indiscutible que el centro de día ha ofrecido a su madre, así como a otros pacientes, Albert quería poder devolver parte de esa labor a la Fundación con un proyecto deportivo y social para recaudar fondos. Junto con tres compañeros de trabajo (Christian Garcia, Tristam Knoph y Eloi Valenzuela) se han marcado el reto solidario de correr la Titan Desert con el fin de dar visibilidad a esta fundación y conseguir fondos para dotar de nuevas instalaciones, recursos y servicios para personas con Alzheimer del Camp de Tarragona y que complementen al Centro Terapéutico para el Alzheimer y la Unidad de la Memoria de Reus. Con el lema «#pedaleandoxalzheimer» buscan esas donaciones a través de la plataforma de crowdfunding social y solidario migranodearena.com.
¿Por qué la Titan Desert? Albert Roda siempre le había llamado la atención esta carrera: «Une mis dos pasiones, la aventura y el deporte. Solo le faltaba un tercer punto, el solidario que es lo que le añadimos nosotros». El deportista tarraconense propuso participar en la prueba a sus compañeros de trabajo en la empresa RDT Ingenieros con los que salen de ruta ciclista los fines de semana. La respuesta fue total. Y así, en apenas un abrir y cerrar de ojos, estaban metidos en una de las carreras de BTT más difíciles del planeta.
Todos ellos tienen una base física. Son deportistas y con experiencia en pruebas de triatlón, de ciclismo, de BTT o de trail. Roda compitió durante 9 años con el equipo de remo del Reial Club Nàutic de Tarragona y en los últimos años ha participado en la WOP Challenge Bilbao-Bizakia y en la Panda Raid 2017 (Marruecos). Pero ya advierte, para sí mismo y para sus compañeros, que «la Titan es otra historia, en la que tenemos que ir preparados física y mentalmente».
La preparación es parte fundamental de la carrera que les llevará recorrer los 600 km a atravesar los paisajes más increíbles de Marruecos durante las seis etapas (del 8 al 13 de mayo). «Como reto deportivo la carrera tiene varias fases antes de la prueba propiamente dicha. Los cuatro meses de entrenamientos, la planificación del recorrido, el aprendizaje de la lectura del terreno con el GPS, etc.
Lo de los entrenamientos lo llevan bien. Desde diciembre están siguiendo los consejos del libro ‘Planifica tus pedaladas’ con rutinas de entre 100 y 200 kilómetros a la semana. Lo que supone unas 12 horas. Un programa que les ha permitido «evolucionar sobre la bici y en el conocimiento de tu cuerpo para gestionarlo de la mejor manera». Esa será una de las claves en la Titan. «Sobre todo en la etapa maratón en la que tendremos que cargar material para dos días». Todo el material es nuevo, «para minimizar las averías», dice aunque si se producen hay tres ingenieros y un mecánico para solucionarlas. De sobra. También tienen fisio y asistencia médica de VBSports para que nada falle y puedan acabar el reto por el Alzheimer.