La peatonalización completa de la calle Carles Buïgas finalmente no verá la luz este 2024. Aunque la previsión inicial era que los trabajos de la segunda mitad de la vía estuvieran finalizados este mes, el Ayuntamiento de Salou ha concedido a la empresa responsable de las obras una prórroga hasta el 30 de marzo. De esta manera, una de las principales arterias turísticas de la ciudad podrá reabrir de cara a Semana Santa después de más de un año de trabajos.
La segunda fase de la remodelación de Carles Buïgas se puso en marcha a finales de 2024 y actualmente encara la recta final. De hecho, ya hay muchos tramos donde se han retirado las vallas y las personas pueden circular a pie. Tras finalizar la instalación de todos los servicios soterrados, el alumbrado y la jardinería, las obras se centran ahora en la nueva pavimentación tras suprimir las antiguas aceras.
Según detallan fuentes municipales, la empresa adjudicataria, Tecnología de Firmes SA, solicitó una ampliación del plazo «a causa de varios factores, algunos de ellos relacionados con la meteorología, que han provocado ciertos atrasos». «A pesar de estos ajustes, la obra se encuentra en un estado bastante avanzado y, en términos generales, su desarrollo ha sido muy satisfactorio», señalan desde el consistorio.
Cabe recordar que, una vez iniciadas las obras, el Ayuntamiento tuvo que aprobar una modificación del proyecto para dar respuesta a la recogida de aguas pluviales. En Carles Buïgas, confluyen muchas calles en pendiente y es uno de los ámbitos inundables en caso de fuertes lluvias. Ahora, la zona donde se ha instalado el nuevo depósito colector de pluviales –con capacidad para 1.000 m3 de agua–, en el cruce con las calles Murillo y Amposta, es la que se encuentra menos avanzada.
Mientras, en buena parte de la vía únicamente está pendiente el asfaltado y la instalación del mobiliario urbano. La segunda fase de la peatonalización abarca unos 11.000 m2 de superficie, desde la calle Murillo hasta el cruce con la calle Vendrell. Actualmente, se está instalando el nuevo pavimento, una solución innovadora y con formas geométricas, que es diferente al de la primera mitad, inaugurada en 2021. La inversión total asciende a 5,6 millones de euros, 3 de ellos procedentes de los Fondos Next Generation.
Falta de parking y contenedores
Mientras, los vecinos de la zona celebran la transformación de esta arteria principal de la zona turística, pero lamentan que no se haya dado solución a la eliminación de plazas de aparcamiento y de baterías de contenedores. «Que dejen de pasar los coches y sea peatonal es estupendo, pero se han generado muchos problemas a los vecinos», asegura Pilar Roig, presidenta de la Associació de Veïns de Salou Est.
Desde la entidad critican que la supresión de los contenedores que había en esta calle obliga a tirar la basura en los contenedores de la calles adyacentes, «pero estos no se han aumentado, con lo que provoca que, al recibir más basura, se saturen», según la representante vecinal. Sobre la eliminación de plazas de aparcamiento y la conversión en zona azul de las restantes, Roig afirma que «algunos vecinos han buscado parking para poder tener el coche, pero no hay plazas para todos. En verano, es un problema, porque la gente tiene que aparcar muy lejos».