E ste verano, que comenzó el jueves, la asistencia sanitaria será peor para una población mayor, según los periódicos.
Entre el 15 de junio y 15 de septiembre el mayor hospital de Catalunya, el Valle d’Hebron, cierra 272 camas (una cuarta parte de sus 1.100), el Arnau de Vilanova, de Lleida, unas 90 camas; en el Trueta, de Girona, no funcionará ningún quirófano por las tardes (normalmente operaban cuatro o cinco); nuestro Joan XXIII reducirá 25 camas. Según el Sindicato de Enfermería SATSE, en el conjunto de Catalunya las camas cerradas serán 2.079, frente a las 850 que lo hicieron en 2023.
Así que mejor no ponerse enfermo mientras esperamos elecciones en octubre y nuevo gobierno, si a los líderes políticos les da la gana, a finales de año.
