Los vecinos de la Part Alta están en pie de guerra desde que el mes pasado la Empresa Municipal de Transports, EMT, informara de que había realizado cambios en el mapa de zonas de aparcamiento regulado. La principal novedad es que muchas de las plazas próximas al barrio en las que solían dejar los coches ahora pertenecen a otras dos zonas: Nord y Llevant.
El cambio ha supuesto en la práctica que los vecinos deben ir a aparcar mucho más lejos de sus casas que hasta ahora, teniendo en cuenta que el número de plazas para residentes dentro del barrio ya es muy limitado.
Antonio Núñez, uno de los afectados, vive en las proximidades del Circ y explica que si antes aparcaba, como muchos de sus vecinos, en el sector de Músics (que ahora pertenece a la zona Llevant). Con los cambios la última vez que encontró sitio fue frente el colegio Sagrat Cor. La distancia a la que dejó el coche de su casa ronda los 1,4 km, y él y su mujer tienen ciertas dificultades de movilidad.
Sergi Angel, otro afectado, explica que paradójicamente no se puede aparcar cerca de la muralla pero sí en la zona de El Corte Inglés «nos están tomando el pelo», señala.
Y es que se da la circunstancia de que la zona de aparcamiento a la que pertenece la Part Alta se ha reducido por el norte y por el este, pero se ha ampliado hacia el centro. El problema, insiste, es que en buena parte del centro, (Rambla Nova y Rambla Vella, por ejemplo) muchas plazas son azules.
Los vecinos, que han comenzado a formar una plataforma (en la última reunión que realizaron en los porchos de la calle Mercería eran una treintena), mañana tienen una reunión con la regidora de barrio, Sandra Ramos. Han elaborado, además, una queja tipo para que los afectados que estén de acuerdo la presenten ante la EMT.
En la queja se lamentan, entre otras cosas, de que para usar las plazas verdes de la Part Alta deben competir con el resto de ciudadanos y visitantes que pueden usarlas como zona azul. «Yo me levanto a las siete de la mañana a intentar buscar una plaza, pero en la puerta de mi casa puedo tener un coche de Alemania o de Francia», se lamenta otra vecina.
Exponen, además, que la situación ha obligado a algunos, como Núñez, a hacerse con una plaza de aparcamiento. Esto también le ha supuesto una odisea porque en el Saavedra, por ejemplo, hay una lista de espera de 200 personas para obtener una plaza fija y en el parking Torroja no está previsto que haya abonados, dice. En su caso ha contratado una plaza en el párking de la Avinguda Catalunya, con lo que ha pasado de pagar 30€ el trimestre a 105€ al mes.
Esta es otra de las quejas: el cambio de zonas se ha producido cuando ya habían pagado el último trimestre del año, por lo que han abonado la misma cantidad de siempre pero han cambiado las condiciones del servicio. Muchos de los vecinos, además, solo se enteraron cuando encontraron un papel en el parabrisas indicando que ya no tenían permitido aparcar en aquella zona.
No se multará hasta Navidad
Desde la EMT aseguran que a los vecinos se les informó a través de un SMS y que si alguno no recibió el aviso se debe a que no ha facilitado su teléfono a la empresa. De todas formas, aseguran, de momento solo se está comunicando el cambio a los vecinos y en lo que queda de año y durante las fiestas navideñas no se multará.
La motivación del cambio de zonas, señalan es «equilibrar la demanda de cada sector con la oferta de plazas». Se trata, además, de tener unos límites más acordes con la Zona de Bajas Emisiones, ZBE. La Part Alta, junto con el centro de la ciudad está dentro de la ZBE, pero la zona Nort y la zona Llevant están fuera.