La receta de hoy es un delicioso guiso de verdura con quinoa. Creemos que aunque ya estamos encarando meses más cálidos todavía apetecen guisos calentitos y sabrosos. Este es un plato que puede ayudaros para conseguir un triple objetivo comer sano, rico y que, además, sea de preparación fácil. Su elaboración no es complicada. El protagonista del guiso es una pequeña semilla que les encanta a todos aquellos que apuestan por una alimentación natural y ecológica, la quinoa.
Originaria, según los estudiosos, en el entorno del lago Titicaca, los Incas la llamaban la madre de todos los granos. Con un entorno tan lejano en nuestra historia ahora incluso la NASA se ha interesado por esta pequeña semilla para su cultivo en el espacio por ser considerado un superalimento.
Aporta una cantidad de energía y fibra similar a la de los cereales integrales pero además aporta una cantidad excepcional de minerales y como diferencial una elevada cantidad de proteínas, en concreto, un 13% de su peso. ¡El doble que el arroz! Por este motivo para los veganos representa un alimento tan importante porque les permite completar su dieta con proteína gracias a la quinoa.
En cocina la receta base es muy sencilla: se ponen dos medidas de agua a calentar y, cuando rompe a hervir, se vierte una medida de quinoa, se tapa y se deja cocer a fuego medio-bajo hasta que haya absorbido el agua. Suele tardar entre unos 12 y 15 minutos.
Lo importante es echar la quinoa cuando rompa a hervir el agua y vigilar la cocción hasta que los granos estén hechos, es decir, hasta que se vuelvan transparentes y aparezca el germen en forma de colita en espiral.
Los granos crujientes tienen un sabor que recuerda algunas veces al arroz y al cuscús a partes iguales. El sabor es delicado y no se apodera del resto de sabores de un plato si está bien cocinada.
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Ingredientes - 2 personas
* 2 cucharadas de aceite de oliva
* 1 cebolla grande, cortada en cubitos
* 2 tazas de calabaza de violín en cubos
* 1 (o más) cucharadita de comino molido
* 1 (o más) de cilantro molido
* 1⁄2 cucharadita de pimienta negra + cúrcuma
* 700 ml de caldo de vegetal o agua
* 100 gr de quinoa
* 2 puñados grandes de col rizada picada o espinacas o acelgas
Preparación
1. En una olla grande, calienta el aceite a fuego medio. Agrega la cebolla, sal y pimienta, remueve ocasionalmente, hasta que se vuelva transparente. Agrega los cubos de calabaza y remueve.
2. Deje que la calabaza se cocine durante unos minutos, a continuación, añade el ajo, el comino y el cilantro.
3. Añade los tomates, el caldo y la quinoa. Tapa y cocina a fuego lento hasta que la calabaza esté tierna y la quinua esté bien cocida (unos 40 minutos). A mitad de cocción prueba y ajusta los condimentos.
4. Cuando la sopa está casi hecha añade dos puñados de col picada. Remueve y deja cocer hasta que se ablande (unos 3 minutos más).
5. Sirve el guiso en un plato hondo y añade el huevo duro cortado a a trozos o rallado.
6. Puedes guardar lo que te haya sobrado en la nevera durante 4-5 días o congelarlo.