E l nuevo curso político empezó hacer un par de semanas de la misma forma en cómo terminó: con la Estación Intermodal en el Aeropuerto de Reus. En aquella ocasión, además, para ratificar su llegada. Ajenos a la decisión del Gobierno de suspender la inversión en El Prat, desde el ayuntamiento se aseguró que la hoja de ruta prevista para el aeródromo reusense no corre peligro. Un anuncio, por sorpresa, después de que los representantes municipales visitaran Madrid y que inició una catarata de anuncios de grandes proyectos. Seguramente la más prolífica de estos últimos años.
¿Casualiad? Podría ser, aunque yo me decantaría más por asegurar que, a todos los efectos, el gobierno municipal aborda este inicio de curso como una campaña electoral. Puede parece demasiado pronto para pensar en mayo de 2023, aunque no tanto para los partidos, que ya han empezado a urdir las estrategias de cara a dichos comicios. Los anuncios que lo corroboran empezaron con el ayuntamiento explicando, tras alcanzar un acuerdo con la URV, que se hará cargo de los costes de la redacción del estudio previo para trasladar la Facultat de Medicina a Bellissens. Un plan de actuación que quedó inmortalizando con una fotografía con los protagonistas figurando ante la cámara.
Sobra decir, eso sí, que la nueva Facultat de Medicina es un equipamiento de una gran importancia para Reus que lleva años atascado. Concretamente desde el 2003, cuando se planteó la construcción de una nueva facultad porque la actual (situada en la calle Sant Llorenç) se había quedado pequeña. Pero las indecisiones iniciales, y la crisis económica después, dieron al traste con el proyecto. Esperemos que esta vez sea la definitiva.
El otro acto, éste de alcance supramunicipal, tuvo lugar en el Palau Bofarull. El rechazo, justificado, a la línea de alta tensión que atravesará la demarcación de Tarragona también se acompañó de una foto de familia con los representantes políticos de todos los municipios afectados.
Y muchos proyectos más...
Después vino la rueda de prensa para exponer la voluntad que existe desde Madrid de mantener el proyecto de la Intermodal y llevar a cabo una inversión para el Aeropuerto de Reus de 31 millones de euros. En última instancia, y ya ratificado por el pleno municipal, la licitación de las obras del Centro de Aguas y Fitness que se situará al lado del actual Pabellón Olímpico.
Y en medio de todo ello tampoco hay que olvidar el anuncio de la adjudicación de los trabajos de peatonalización del Raval de Santa Anna, la construcción del nuevo Skatepark, el inicio del proceso participativo para diseñar el futuro del polémico Mercat del Carrilet o la visita a la ciudad del conseller d’Economia Jaume Giró. La carrera electoral ya ha empezado...
