Recientemente, la vinoteca de Tarragona Glops organizó un showroom de vinos y derivados de la mano de la distribuidora especialista de la zona, Stilvins. Uno de los productos que nos sorprendió por su frescura y originalidad fue una bebida que mezclaba el clásico vermut con un refrescante cóctel: el vermujito.
Gerard Bellod es la tercera generación de una bodega con más de 80 años de historia. Corría el año 1943 cuando Josep Bellod fundó Bodegas Bellod, «especializándola en la selección de los mejores vinos producidos en las zonas vitivinícolas del país», explica Gerard. Tras años de experiencia en el sector, en 1998 decidieron comprar una finca en la que elaborar sus propios vinos de autor, a la que llamaron Mas del Nen. Con 30 hectáreas de viñedos en la actualidad y ubicado en Sarral (Conca de Barberà), los primeros caldos del Mas del Nen vieron la luz en 2003. «Desde que arrancamos a finales de los noventa, fue un espacio autosuficiente y sostenible 100%», relata Gerard: «ya se instalaron placas solares y contamos con una balsa para el riego o mantenimiento que puede acumular hasta un millón de litros de agua de lluvia».
Mas del Nen elabora vinos, mistelas, vermuts, generosos... «Trabajamos con garnacha blanca para los vinos blancos, garnacha negra y merlot para los rosados y cabernet sauvignon, merlot, syrah y ull de llebre (tempranillo) para los tintos», describe Gerard. «No son variedades autóctonas, pero la climatología de la Conca de Barberà lo permitía y queríamos ofrecer unos vinos de autor distintos».
Una vida ligada a las viñas
La vida de Gerard Bellod siempre ha estado íntimamente ligada al mundo de la viticultura y la enología. Desde hace cuatro años, lleva la gerencia empresarial de Bodegas Bellod y es, a su vez, el administrador de Mas del Nen, donde se encarga directamente de la elaboración de los vinos y del control y desarrollo de nuevos productos. Y en ese punto de querer ofrecer cosas nuevas, surge el Vermujito, un proyecto en común con La Vermood, que como define su fundador, Jordi Gurrea, «es una marca que engloba todo el momento social que representa tomar el vermut».
«Desde hace un tiempo, el vermut está recuperando su protagonismo, pero al ser muy dulce y tener un punto alcohólico algo alto, en verano notábamos que bajaba el consumo», comenta Gerard. «Buscamos algo refrescante, con menos graduación y con el que poder sustituir el vermut en verano. Fusionamos, de forma equilibrada, dos productos muy de moda: el tradicional vermut y la parte rompedora y refrescante del mojito».
Bellod & Gurrea:
Recomiendan servirlo con mucho hielo en un vaso de 30 cl y acompañado de menta y lima
En un primer evento probaron este cóctel, que ya de inicio acaparó muchos fans. Y para ser un producto relativamente nuevo, cuya introducción en el mercado es más complicada, está teniendo una aceptación fantástica: «hicimos una producción pequeña de 3.000 botellas para el lanzamiento que fue a finales de marzo para testear la aceptación, pero tres meses después ya estamos produciendo 10.000 unidades más», afirma Gurrea. Explica que han conseguido que el producto final quede prácticamente igual que si preparamos un cóctel, un punto a favor también para la hostelería.
Sus creadores tambien apuntan a que el éxito del Vermujito es que «nos traslada un poco al Caribe, manteniendo la esencia del Mediterráneo».