Frenar el impacto de la esclerosis múltiple (EM) y mejorar el bienestar físico, psíquico y social de las personas que conviven con la enfermedad es la prioridad de los especialistas médicos, como el Dr. Juan J. Hernández, neurólogo en el Hospital Comarcal del Vendrell (Baix Penedès) de la Xarxa Sanitària i Social de Santa Tecla. Él mismo repasa las principales claves de la enfermedad.
¿Qué es?
Es una enfermedad inflamatoria y neurodegenerativa que afecta al sistema nervioso central; no solo a la mielina –que es el recubrimiento de los nervios de protección y conducción rápida de los impulsos–, sino también a estructuras como los axones, cuya función es transmitir información en forma de impulsos nerviosos desde una neurona hacia otras neuronas.
Causas
La EM es consecuencia de una alteración del sistema inmune en personas que están genéticamente predispuestas. Entonces, un factor externo, como puede ser un virus, en edad precoz, puede provocar un ‘error’ en la reacción inmunitaria que ataque las estructuras del sistema nervioso central. Por todo ello, se cree que es una conjunción de factores genéticos y ambientales.
Tipologías
A día de hoy, se distinguen diferentes fenotipos. El primero, y más frecuente, es la remitente-recurrente, cuando la EM cursa en brotes de inflamación; y el segundo es la forma primaria-progresiva, que se caracteriza por un empeoramiento progresivo de la discapacidad lo largo de la vida.
Diagnóstico
Básicamente es la combinación de síntomas –y hallazgos en la exploración neurológica– y de pruebas complementarias, como una resonancia, análisis de sangre para descartar otras causas y una punción lumbar para analizar el líquido cefalorraquídeo.
Tratamientos
Existen una veintena de tratamientos, que en su mayoría inciden en la fase inflamatoria, es decir, en los brotes clínicos. Por el contrario, los tratamientos actuales todavía no controlan la progresión silente de la esclerosis múltiple, es decir, la progresión de la enfermedad independiente de los brotes. Se debe a una actividad inflamatoria diferente que es causante de un progresivo acúmulo de discapacidad.
También repercute en una falta de concentración y de capacidad de atención
Calidad de vida
La EM viene siendo la principal causa de discapacidad entre los jóvenes después de los accidentes de tráfico. Si bien, con los tratamientos actuales se está logrando disminuir dicha discapacidad acumulada. No ocurre lo mismo con la fatiga, uno de los llamados síntomas invisibles, que afecta a más de un 80% de pacientes. Hay personas que no pueden ni estar 10 minutos leyendo o realizar las tareas del hogar, e incluso terminan extenuadas después de la jornada laboral. Algún paciente la ha descrito de forma muy gráfica como una combinación de resaca, más jet lag y gripe, lo que también repercute en una falta de concentración y de capacidad de atención.
Perspectivas de futuro
Los esfuerzos en investigación se centran en evitar la destrucción más que en intentar reparar el sistema nervioso, es decir, en frenar la evolución de la esclerosis múltiple. Si bien, en breve estaremos en condiciones de administrar tratamientos que frenen la progresión de la enfermedad y atajen la discapacidad, y tal vez controlar los síntomas invisibles.
