En los últimos años, se ha hecho de lo más popular decorar la casa con telas de araña y calaveras, y salir a pedir chuches por la calle disfrazados, con tal de celebrar Halloween, esa fiesta previa al día de Todos los Santos, que hasta hace poco solo se veía en otros países. A los niños les encanta y, por eso, es un buen momento para buscar alguna lectura en esta línea con la que dar rienda suelta a su imaginación.
Hoy traigo un par de propuestas, de entre las muchas novedades que han salido, precisamente, para esta época.
La primera es un libro pensado para peques a partir de 6 o 7 años, inicio de una colección que apunta maneras: El club de los cazadores de monstruos. El tren fantasma de Bad Markus. Emilia, Max, el cerdito rastreador y su abuelo forman este club tan variopinto dedicado a encontrar y expulsar monstruos. Cada uno tiene su papel: el abuelo es un gran inventor de trastos monstruosos, el cerdito es capaz de encontrar a cualquier criatura olisqueando, y Emilia y Max gozan de grandes habilidades para atraparlos y sacarlos de donde molestan, en este caso, del tren fantasma de Griselda Graus, que ya no sabe qué hacer para que dejen de asustar a sus clientes. THiLO escribe de manera ágil y sencilla esta aventura llena de acción que Alexander von Knorre ilustra a todo color con divertidas imágenes en las que, en muchas ocasiones, hay que encontrar determinadas pistas para ayudar a los protagonistas a avanzar en sus pesquisas. Este fantástico recurso hace que los lectores se sientan parte de ese club, interactuando con la historia, y solo quieran que avanzar en la lectura como un cazador de monstruos más.
Mi segunda propuesta está encaminada a jóvenes de a partir de 9 o 10 años, y es el inicio de una trilogía que puede dar mucho juego: El cementrio de Everden. La tumba de Walter Malone. El libro empieza en el momento en el que se conocen los tres protagonistas y la situación no puede ser más surrealista: la adolescente Emma y la tarotista Camelia están buscando una tumba en el legendario cementerio de Everden, después de que las dos soñaran con ella, cuando escuchan ruido en una fosa y resulta que... se encuentran con el amnésico Izan, a quien alguien ha intentado asesinar y enterrar, sin darse cuenta de que lo ha dejado vivo. Pese a que cada uno tiene su propio motivo para estar ahí, los tres se unirán en una peligrosa misión que les hará cruzarse con fantasmas, perros espectrales y asesinos. Beatriz Osés escribe esta historia llena de suspense y terror con grandes dosis de humor e intriga, lo que enganchará muy seguramente al lector, que querrá descubrir quién se esconde en la tumba de Walter Malone. Es muy probable que también busque seguir con los siguientes libros de la trilogía para desentrañar el resto de secretos que, al finalizar este, se quedan convenientemente sin resolver. Las espectaculares y contrastadas ilustraciones en blanco y negro de Mónica Armiño suman tenebrosidad al texto, sobre todo cuando su objetivo es dar forma a lo imposible, como al fantasma o los mensajes que este trata de transmitir a este grupo de defensores de la verdad.
Seguro que con estas lecturas llenas de misterio, los lectores más jóvenes disfrutarán un montón de la noche más terrorífica del año.
Título: El club de los cazadores de monstruos. El tren fantasma de Bad Markus
Autor: THiLO
Ilustrador: Alexander von Knorre
Editorial: Anaya
Precio: 8.95 euros
Edad recomendada: A partir de 6 o 7 años
Título: El cementerio de Everden. La tumba de Walter Malone
Autora: Beatriz Osés
Ilustradora: Mónica Armiño
Editorial: Destino
Precio: 12.95 euros
Edad recomendada: A partir de 9 o 10 años
Ana Punset es escritora.