Imágenes de archivo, una mina de oro

Ficción. El reusense Santi Suárez-Baldrís es el productor de la serie ‘Kimeres’, que recicla fondos documentales fílmicos y fotográficos

25 julio 2024 21:16 | Actualizado a 26 julio 2024 14:00
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«La primera ficción construida sobre imágenes de archivo que vi era un cortometraje sobre un aviador. Fue en el Festival Memorimage, hace más de veinte años. Aquella película me impactó, no tanto por la historia en sí, sino porque era la primera vez que veía una especie de experimento audiovisual y me hizo pensar: Pero, esto... ¿Es verdad o es mentida?».

Las palabras del guionista y productor de cine reusense Santi Suárez-Baldrís, de Un Capricho Producciones, son una prueba fehaciente de cómo un recuerdo cinematográfico puede ser el empujón para crear nuevas experiencias memorables.

De este modo, producida por 3Cat y Un Capricho de Producciones, la serie de ficción Kimeres, que se estrenó ayer en la plataforma 3Cat (www.ccma.cat/3cat/kimeres), se construye completamente a partir de la reutilización de imágenes de archivo.

En total, son 6 episodios de 25 minutos con historias autoconclusivas, propuestas por profesionales del sector audiovisual y que trabajan en Catalunya: Pep Bras, Natza Farré, Liliana Torres, Alberto Marini, Fernanda Rossi y Santi Suárez-Baldrís. Además, el proyecto cuenta con la colaboración de otros directores y actores y actrices como David Verdaguer, Jaume Balagueró, Mònica Pérez (que actualmente reside en Altafulla), Jordi Ríos, la reusense Georgina Llauradó y Vicenta N’Dongo.

«Cuando les propusimos participar en el proyecto, les dimos plena libertad para crear cada capítulo. Después, basándonos en el guión, buscamos las imágenes con la ayuda de la documentalista Patricia Fombella, que se ha pateado todos los archivos del país», asegura el cineasta reusense.

Ni más ni menos, el proyecto aglutina imágenes procedentes de casi 30 archivos nacionales, comarcales y municipales, 7 archivos internacionales, 97 fondos fílmicos y fotográficos y 6 archivos personales. En este sentido, Suárez-Baldrís subraya el trabajo ingente a la hora de gestionar los derechos de autor y de uso, puesto que «hemos resignificado las imágenes, es decir, las hemos alterado y manipulado».

Profesionales del sector audiovisual que trabajan en Catalunya han propuesto las 6 historias

De una comedia a la IA

Entonces, bajo la condición de dar una segunda vida al material audiovisual, Pep Bras, que ha escrito guiones para Andreu Buenafuente o Santiago Segura, es el director del episodio L’àlien i l’imbècil, una comedia de ciencia ficción.

Por su parte, Natza Farré (actualmente presenta Està Passant) es la responsable de Una altra història. «Es una propuesta experimental en la que el espectador debe encontrar su propio hilo narrativo», explica Santi Suárez-Baldrís. En cambio, la cineasta Liliana Torres se inspira, en La ciutat no era verge, en el recuerdo de su llegada a Barcelona desde Vic, y «de cómo fue, bajo su punto de vista, el comienzo de una relación problemática con la ciudad; es decir, a través de una experiencia personal, invita a descubrir la historia de la ciudad y del país». Por otro lado, Alberto Marini es el guionista y director de La llegenda fosca dels castells. «Es como ver un episodio de Crims sobre un tema que levantará ampollas, ya que es una historia ficticia que pone el foco en la expansión del mundo casteller, todo alrededor de una banda criminal», relata Santi Suárez-Baldrís.

En cambio, la guionista Fernanda Rossi ha escrito y dirigido el episodio Okupes!, «en el que denuncia cómo los poderes occidentales y las grandes empresas, de acuerdo con algunos gobiernos de Suramérica, ponen en venta y ocupan zonas de la selva amazónica, obligando a sus habitantes a abandonar sus tierras».

Por último, de su capítulo, La consciencia, el productor reusense describe que «es un relato de ciencia ficción sobre una inteligencia artificial que, por un error del programador, cobra vida y empieza a actuar sin haber asimilado ninguno de los códigos morales que tenemos los seres humanos».

Viendo el resultado, Santi Suárez-Baldrís asegura que Kimeres pone en valor la importancia de ‘reciclar’ las imágenes de archivo, así como el trabajo excepcional que realizan los archivos. Por esta razón, opina, «la verdadera ‘kimera’ ha sido plantear una manera nueva de narrar historias, relacionarnos con la audiencia y utilizar un material audiovisual que, aunque se creó con una determinada intención, ahora se presenta bajo una nueva mirada. Ha sido un trabajo de minería que saca a la luz verdaderas joyas».

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