Racing Ferrol es un habitual en los play-off de ascenso a Segunda División. Después de una breve etapa, a principios de los 2000, en la que se dio de bruces con el barro de Tercera División, el cuadro ferrolano ha regresado a escena y aparece en la fotografía de los últimos play-off enfrentándose al Nàstic y también al CF Reus. Dos eliminatoria recientes con dos finales bien distintos. Cara para los granas y cruz para los rojinegros.
En el costado del Nàstic el enfrentamiento más recordado es el de la temporada 2013-14. El cuadro gallego fue el primer rival de los tarraconenses en el play-off. Los granas habían quedado cuartos, debido a los tres puntos que les quitó Competición por alineación indebida ante el Atlético Baleares. Por su parte, el cuadro verde había sido segundo en su grupo. Y eso que acababan de subir a Segunda B. Igual que este año, el Racing Santander acabó primero en su tabla.
Por todo ello aunque los tarraconenses tenían el factor campo en contra, eran favoritos. Así lo demostraron en el verde. Los chicos de Vicente Moreno ejecutaron un plan de eliminatoria casi perfecto. En el primer partido, en el Nou Estadi, desarmaron al rival con un complejo entramado en el centro del campo que no dio opción. El resultado (2-0) fue muy corto para el dominio que ejercieron los tarraconenses que jugaron más de media hora con diez jugadores. Ni así el Racing Ferrol pudo hacer nada para maquillar un marcador incómodo. Pero no solo porque remontar dos goles en un play-off fuera una faena de por sí complicada sino porque la imagen de equipo sólido y tan seguro de sí mismo que dejaba ese Nàstic de Vicente Moreno eliminaba cualquier atisbo de remontada que pudieran soñar los gallegos.
A Malata confiaba más que sus propios jugadores, entre los que se encontraba un Manu Barreiro a punto de eclosionar. El delantero gallego se había convertido ya en una máquina goleadora y los equipos de Segunda División ya estaban llamando a su puerta. Tres años después firmaría por el Nàstic para convertirse en el ídolo de la salvación de la temporada 2016-17.
Volviendo a la eliminatoria, el Infierno verde de A Malata se apagó en cuanto entendieron que ese equipo visitante era impenetrable. En un partido que firmaría el propio Raül Agné, el Nàstic dejó pasar los minutos sin sufrir ni un solo acercamiento. Un duelo plácido para sellar el pase a las semifinales en las que esperaba el Sestao.
Es la última vez que el Nàstic y Racing Ferrol se vieron las caras, pero ambos comparten una larga historia de enfrentamientos. Se han medido en 24 ocasiones con un balance claramente favorable a los granas. La mitad de los partidos han acabado con victoria tarraconense, por nueve empates y solo tres derrotas. Unos números que invitan al optimismo.
Además, en las filas granas ya saben lo que es marcarle al Racing en play-off. Fran Carbia fue el autor del único gol reusense en la eliminatoria de play-off de la temporada 2014-15. Su tanto no sirvió para nada, ya que el Ferrol llevaba un 1-0 de la ida y se había puesto por delante en el Estadi Municipal. En ese Reus también jugaba otro actual miembro de la plantilla del Nàstic, Edgar Hernández, que vivió el lado amargo de la derrota. Los dos atacantes quieren resarcirse de ese duelo y nada mejor que hacerlo con la camiseta grana en un choque que puede devolver al Nàstic a Segunda División.