Alan Godoy es el nombre propio de este mercado de invierno de fichajes. El delantero canario ha desatado una puja entre muchos clubes de Primera RFEF entre los que está el Nàstic. En estos próximos días parece que el ariete resolverá su futuro y desde la entidad tarraconense se respira optimismo. Lo que al comienzo de la ventana de fichajes parecía una operación muy complicada e incluso casi imposible se ha ido calentando con el paso de los días. Gran parte de culpa la tiene el propio Alan Godoy que ha cumplido con su palabra. Si no había oferta al Eldense de otro club de Segunda División, el Nàstic sería su prioridad. Jugar en Tarragona es lo que tenía en mente en caso de volver a Primera RFEF.
En las próximas horas parece que se resolverá la puja y desde el Nàstic confían en ser el ganador. De serlo, no será por una cuestión económica. El deseo del jugar habrá primerado por encima de los billetes. Clubes como Ceuta, Marbella, Murcia o Hércules le intentar tentar con ofertar muy importantes en lo económico, pero Godoy solo tiene la vista puesta en Tarragona.
La historia de Godoy con el Nàstic comenzó la pasada campaña. Fue cuando Javi Sanz le convenció para romper su cesión con el Mirandés y aterrizar en Tarragona en busca del ascenso. El canario impulsó al Nàstic con su talento y sus goles y solo se quedó a unos segundos de ascender a Segunda División con la zamarra grana.
Aquel no ascenso privó a Godoy de poder seguir en Tarragona. Jugar en Segunda División con el Nàstic era su deseo, pero perder la eliminatoria final ante el Málaga lo rompió. A los pocos días, el canario anunciaba que no seguiría en Tarragona al terminar su cesión el 30 de junio de 2025.
Godoy regresó al Alavés, pero rescindió el contrato y firmó por el Eldense de Segunda División tras un verano de muchos rumores. Finalmente aterrizó en Elda con el objetivo de intentar ser un delantero importante en la categoría de plata. Sin embargo, Godoy se ha vuelto a encontrar con un contexto negativo. Dani Ponz, técnico del Eldense, apenas le ha dado oportunidades y con el mercado invernal aproximándose pidió salir. Su club no puso pegas a ello y Godoy comenzó a buscar una salida. En ese momento inicial su prioridad era seguir jugando en Segunda División.
Sin embargo, la opción de Segunda División no apareció y regresar a Primera RFEF comenzó a ser una opción sobre la mesa con el paso de las días. Clubes como Ceuta, Hércules, Marbella y Murcia están dispuestos a todo a día de hoy por hacerse con los servicios de Godoy. No solo ellos, Real Madrid Castilla y Barça Atlètic son dos poderosos filiales que también le quieren. Los blancos están dispuestos a pagar una importante suma de dinero por ficharle, pero la voluntad del jugador ha frenado un fichaje que hace una semana se daba por hecho.
Por suerte, en esa puja también está un Nàstic de Tarragona que está jugando bien sus cartas. La dirección deportiva siempre ha aguardado a la espera porque confiaba en la palabra del jugador que siempre ha dejado clara su postura de volver a Tarragona en caso de tener que regresar a Primera RFEF. Ni el interés de grandes filiales ni las tentadoras ofertas económicas de otros proyectos de Primera RFEF han hecho cambiar de opinión a un jugador que en estos momentos piensa en grana.
El Eldense quiere poner fin a este culebrón y traspasar a Alan Godoy. El Nàstic está dispuesto quemar las naves y hacer el sueño realidad. En los próximos días se va a decidir el destino del delantero canario. Lo que hace unas semanas se veía como improbable ahora se ve factible. La entidad tarraconense está preparada para dar el golpe sobre mesa. Fichar a Godoy sería dar un salto cualitativo y anímico para una segunda vuelta de muchas emociones.
