El pasado mayo la llegada de una mantarraya a la orilla de la playa de Calafell sorprendió a muchos bañistas. Además el ejemplar alumbró a una cría.
Aunque no es extraño que un ejemplar de la especie se acerque a arenales con presencia humana para dar a luz, sí que es poco habitual.
También sorprendió porque se conoce muy poco de las rayas. Ahora la asociación Catsharks dedicada al estudio y la conservación de los elasmobranquios (tiburones y rayas) y sus ecosistemas mediante la investigación y la educación ha realizado un descubrimiento que debe cambiar la visión sobre la especie.
Descoonocido
Catsharks ha concluido que las rayas pueden producir sonidos, algo que se desconocía. Hasta ahora se ha investigado mucho en la emisión de sonidos por parte de mamíferos marinos como los cetáceos, pero no de los peces.
«Pero en peces y especialmente tiburones y rayas esta capacidad era desconocida. Sólo se habían documentado tres especies de rayas capaces de emitir sonidos pero no son típicas del Mediterráneo», explican en la asociación.
Ahora se ha descubierto a las primeras especies de rayas que producen sonidos en el Mediterráneo. El hallazgo fue documentado entre noviembre y diciembre de 2023 en Marina Alta (Alicante) en un nuevo área de importancia para tiburones y rayas.
De las cuatro especies registradas, dos producen sonidos. Son la raya áspera (Raja radula) y la (Torpedo marmorata).
Sin embargo son varias las rayas detectadas en el Mediterráneo. Si quienes saber más sobre ellas en este enlace
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Los investigadores comprobaron que los ejemplares emiten un click al abrir y cerrar la boca acompañados de movimientos con las aletas pectorales.
Consideran que es una acción defensiva frente a potenciales amenazas. Esos clicks son de mayor intensidad ciando la amenaza está cerca y disminuye cuando se aleja.
La investigación debe incluir a la especia en los estudios sobre afectación de sonidos como se hace con los cetáceos
La investigación lleva a considerar que la producción de sonidos es común a todas las rayas. También e las que se dejan ver en las costas de Tarragona.
«Ya no se puede decir que los elasmobánquios son predadores silenciosos», destaca Catshark y «abre la puerta a preguntarse si los individuos son capaces de distinguir o responder a los sonidos».
La conservación
El hallazgo es importante para la conservación de la especia, muy amenazada de extinción.
Así es probable que los ruidos generados por el hombre pueda afectar a la ecología de la especie como lo hace en cetáceos y la haga más vulnerable. «Es necesario integrar a las rayas como especies sensibles en los estudios de impacto ambiental para evitar que sigan disminuyendo.
Las observadas en playas de Catalunya suelen ser rayas-látigo violeta (Pteroplatytrygon violacea). Se las conoce comúnmente rayas látigo o pastinacas.
El aumento en el número de avistamientos es por comportamientos reproductivos y es muy importante que no se les moleste. No son agresivas, pero tienen una o dos espinas en la base de la cola que utilizan únicamente como mecanismo de defensa cuando se ven amenazadas, su picadura suele ser muy dolorosa.
