Más de 250 nadadores divididos en 42 equipos se han lanzado al agua en el Port de Calafat a las 8 de la mañana y han recorrido 23 kilómetros hasta llegar al Port de Cambrils para completar la tercera edición de la travesía Swim for ELA. El objetivo no es llegar el primero, sino recaudar fondos para luchar contra esta enfermedad. Y lo han logrado.
La cifra ha ascendido hasta los 146.051,81 euros, lo que significa que es el récord de España de recaudación en una prueba solidaria.
La meteorología era lo que más preocupaba a nadadores y organización, pero los participantes se han encontrado con un día soleado y unas aguas tranquilas, lo que ha permitido que la prueba se desarrollara sin incidencias.
Siscu Morell, tesorero de la asociación y enfermo de ELA, confiesa al Diari su emoción al ver por primera vez la salida desde Calafat. “He llegado muy tranquilo, pero cuando he visto a todos los nadadores de rodillas haciendo el minuto de silencio por todos los fallecidos de ELA y el violín en directo ha sido muy emocionante”. Joana Bono, vocal de la entidad, añade que es una momento “que toca la fibra a cualquiera”.
A las 12:00 han llegado los ciclistas que se han hecho más de 60 km para colaborar en la lucha, así como todos los que han salido desde Reus andando que han llegado al municipio de costa sobre las 11.00 horas.
En la zona del Barlovento, en el Nàutic de Cambrils, se encuentran decenas de personas participando en las diferentes actividades. Una de las más aclamadas por los pequeños es el taller de Plàncton Diving que ha organizado tres actividades donde los niños y niñas deben buscar diferentes animales entre la arena, dibujar o distinguir la posidonia en unas “cajas ciegas”. Muchos otros se encuentran haciendo el vermut bajo el cálido sol que acompaña la jornada o bailando la música que pinchan varios Djs
Según confirman desde la organización se espera que los primeros nadadores lleguen antes de las 13.00 horas. “El mar está muy tranquilo, van un poco a contracorriente, pero van todos volando”, confirma Bono.
Sobre las 14.00 horas, una hora mas tarde de lo previsto, han llegado los primeros nadadores. Malalts d’aigua de Tarragona (Joan Carles, Lluís, Arnau, Alberto, Celia, Raúl i Miquel) cruzaron la meta cogidos de las manos, sabiendo que habían culminado una larga travesía pero que valía la pena el esfuerzo por colaborar en este acto tan emocionante. Joan Carles bromea con que le hubiese gustado un trayecto “más complicado”, aunque alguno del equipo sufrió las consecuencias de nadar con medusas, pero que había sido un honor poder participar. “Aquí lo importante no es ganar, sino ser solidarios”, confiesa Joan Carles.
Jordi Cervera llegó con el segundo equipo y asegura al Diari que lo mejor de la travesía es “cuando nos reciben los enfermos de ELA en la llegada”. Desde los Malalts d’Aigua hasta las 17 horas han ido llegando paulatinamente los 42 equipos cerrando la tercera edición del Swim for ELA de la mejor manera posible: recaudando un gran capital para seguir luchando para vencer una enfermedad, que todavía no tiene cura.