Jordi Riera, el vecino de Girona que denunció en redes sociales que le habían ocupado la casa a principios de enero, ha explicado este miércoles que finalmente ha conseguido recuperar el inmueble. Según ha informado en X, el Juzgado de Instrucción número 4 de Girona le dio la razón la semana pasada y el desalojo se ha hecho efectivo hoy. La sentencia, explica, reconocía que la familia de Riera era la propietaria legítima de la casa y que los ocupantes no tenían ningún derecho sobre la finca. Según Riera, se les ha condenado a una multa por usurpación.
El hombre califica el proceso como “duro y agotador” y, tras agradecer el apoyo de vecinos y medios de comunicación, así como el trabajo del juzgado, considera que la ley “debe cambiar”.
“No puede ser que casos tan claros supongan meses de lucha y costes para los legítimos propietarios”, opina. “Esta inseguridad jurídica perjudica a toda la sociedad”, añade. A su juicio, es una situación que “hace subir el precio de la vivienda y del alquiler, y reduce la oferta porque cada vez más personas tienen miedo de invertir en vivienda”.
Riera reclama que la ley permita un “procedimiento exprés” para determinar la propiedad de la vivienda y “actuar en consecuencia”. En este sentido, celebra la decisión que han tomado hoy mismo los jueces de Girona de autorizar desalojos exprés sin orden judicial.
También pide revisar los protocolos para evitar “situaciones absurdas” como la que han vivido ellos cuando, según indica, la actuación policial “acabó favoreciendo a los ocupantes por encima de los propietarios”.
Finalmente, considera que “tampoco se puede normalizar tener que recurrir a soluciones ilegales o paralegales amparadas en la violencia”.