La gira de Pablo López Mayday & Stay Tour recala este domingo (21 h.) en la Tarraco Arena Plaça (TAP), en el marco del Tarragona Music Festival. El músico malagueño presentará su nuevo trabajo, Unikornio. Once millones de versos después de ti, en un concierto en el que promete a sus seguidores que «verán al Pablo de siempre, pegado al piano, pero con una fuerza que es lo más competitiva a nivel emocional y visual de toda mi vida». Sensible y perfeccionista, el compositor lleva la música en la sangre. Es su adicción. Con solo ocho años ya escuchaba a Pink Floyd y cuando pidió un piano para arrancarle notas, se encontró con una guitarra en sus manos. No lo desaprovechó. Músico de formación, es una cara conocida también de los programas televisivos Got Talent y Operación Triunfo.
¿Por qué ‘Mayday’, esa llamada de socorro?
‘Mayday’ se utiliza cuando hay que pedir ayuda. Entonces, es en homenaje a los años de trabajo, de haber hecho una introspección tan grande, en la que tuve que pedir ayuda, sobre todo a mí mismo, para poder conocerme un poquito más y aceptarme como soy. Mayday es una declaración de intenciones y se ve tanto en el sonido que, como siempre, es la locura del piano y también visualmente, ya que la intentamos representar con el equipazo de lujo que tengo.
¿Ha sido muy duro llegar hasta aquí?
No sabría decirte. Porque si uno repasa, depende de las ganas con las que imprimas el filtro que le quieras poner al recuerdo. Realmente me lo he pasado muy bien y me lo estoy pasando muy bien en la vida como para decir algo tan pesado como ‘duro’. Lo que sí hay es un no parar. Lo único difícil, no duro, es que uno ve tanta belleza que, primero se abruma y después quiere más y más. Es como una especie de adicción.
He leído que es adicto a la música. ¿Cómo se lleva a nivel personal?
Yo lo llevo bien, los que lo llevan mal son los que viven cerca de mí. Porque quizás es muy difícil enamorarte de alguien más, por ejemplo, que de lo que amas. Y eso vale tanto para las amistades como para los amores personales de uno y es difícil de llevar. Pero la suerte es que tengo gente muy generosa, muy espléndida sentimentalmente hablando a mi alrededor y eso es la base y la fuente de energía de todo.
Da una imagen de persona serena, pero al mismo tiempo, la de un ser atormentado.
He estado a punto de rebatirte lo de atormentado, pero no puedo. Es más, lo reconozco. La verdad es que es un coñazo estar atormentado, pero un coñazo que después da unas sensaciones y unas alegrías a las que poca gente puede acceder. Es un tesoro. Esa manera tan a ras de suelo a la vez que levitando unos centímetros. Vas dando saltos, es poder visitar casi todas las esquinas del alma de muchas personas, aunque a veces te llevas un guantazo en la cara. Entonces, ese es el tormento.
Después de esta respuesta, ¿es compositor o poeta?
Lo peor es que yo hablo así todo el rato. Realmente me considero atormentadamente compositor, por supuesto.
¿Qué pasa cuando un niño quiere tocar el piano y le cae una guitarra?
Que me di cuenta que quería tocar lo que fuera, pero quería tocar. La guitarra es un instrumento que amo y para mí es muy especial. Cuando uno pide un piano y le traen una guitarra, la educación que me dieron del amor me hizo dar las gracias. Y ya está. Eso fue hermoso.
A pesar de ser músico profesional se hizo muy popular por ‘Operación Triunfo’ o ‘La Voz’.
Eso sí que lo voy a rebatir. En la televisión te conocen cuando estás haciendo un programa como Operación Triunfo o Got Talent. Pero te conocen, ya está. No te siguen, no es tu carrera realmente. Yo llegué a mi barrio con 23 años después de estar en Barcelona en OT y me invitaban a las cervezas; venían los vecinos y me traían a sus hijos pequeños para hacerse fotos. Pero eso pasó. Es como una cerveza que dejas ahí. Se calienta y se le va la espuma. Pues eso sería la espuma. Ahora en Got Talent estoy haciendo algo que me encanta, que disfruto musicalmente y evidentemente tu cara llega a otras partes, pero si no llegan las canciones, yo no puedo salir a tocar. No hay show de televisión que te venda una entrada de un concierto. Eso está claro.
¿Qué le aporta un talent show con gente joven?
¿Qué le van a aportar los jóvenes a un tormentoso? Pues tormento.
¿Por qué?
Sufro porque quiero todo el rato, rápido, decirles cosas, darles consejos. Y me doy cuenta de que la gente tiene su propia personalidad, su idiosincrasia como individuo. Hacer de coach con un talento es una misión casi imposible, porque si hay talento, lo único que puedes hacer es estar a su lado ya que al fin y al cabo se tendrán que labrar su camino solos. Así es que lo único que hago es animarles a que escriban como condenados.
El primer grupo que tuvo fue Niño raro. ¿Usted lo fue?
Y sigo siéndolo. Era un niño viejo. Siempre he sido un niño viejo. De alguna u otra manera siempre he tenido cosas extrañas para un niño pequeño y he sido muy poco de ir a la calle con los demás. Estaba tocando todo el día. Ya de por sí son connotaciones que pueden indicar la rareza de aquel cabezón enano.
Toca casi todos los estilos, pero ¿qué escucha?
Hace un rato, antes de esta llamada, estaba escuchando mientras miraba al infinito un disco que me regaló mi tía, en vinilo, Dark Side of The Moon, de Pink Floyd. Fíjate si era raro que ese disco lo escuchaba con ocho o nueve años. Es una música que da continuidad. Lo que yo pretendo humildemente hacer con Unikornio, que sea una continuidad todo, que tenga un sentido musical.
¿Qué quiere decir que tenga un sentido musical?
Sin hacerlo aposta y sin ser pretencioso Mayday & Stay Tour, la gira en que estamos en este momento, es un honor al disco. Realmente está compuesto por 10 canciones, aunque para mí son solo dos. Como le pasa a Dark Side of The Moon, que son dos caras y prácticamente es una canción continuada. Es más, estoy planteándome en serio hacer una versión del disco sin cortes. Por eso lo estaba escuchando. Porque es también la reminiscencia de ese tipo de música que me gustaba de chico.