Esta mañana, en el recuento de presos en la cárcel de Mas d'Enric (en El Catllar), uno de los internos del módulo 2 no se ha presentado. Los funcionarios han ido a ver qué ocurría en su celda y lo han encontrado muerto.
Las primeras informaciones hablaban de un posible suicidio, aunque fuentes bien informadas han señalado que la causa más probable sería una sobredosis, aunque sin la autopsia no se puede afirmar este extremo.
El hombre, con residencia en Reus, estaba condenado por un delito de robo con violencia e intimidación y cumplía condena hasta 2021. Según otras fuentes, era consumidor de drogas y estaba en el módulo donde hay presos toxicómanos.
¿Cómo entra la droga en la cárcel?
La muerte probable por sobredosis confirma que dentro de la cárcel hay trapicheo de sustancias prohibidas. ¿Y cómo entran? Algunas voces autorizadas señalan que en las visitas de fin de semana llegan estas dosis camufladas y que sortean la vigilancia de los funcionarios.
De hecho, a pesar de posibles registros aleatorios, el centro está dotado de un aparato de rayos X para intentar localizar drogas (u otras cosas prohibidas) en el interior del cuerpo, pero según apuntan algunas fuentes no hay un responsable (radiólogo) para estos casos y el aparato sólo se utiliza en el centro médico de la cárcel tarraconense.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que el registro con rayos X tiene que ser consentido o con autorización judicial. Y en estos casos se intenta aplicar con sospechas fundadas de entrada de droga en Mas d'Enric.