Paso adelante en la construcción del nuevo Hospital Joan XXIII de Tarragona. Las grandes constructoras del momento se disputan uno de los mayores contratos que licita la Generalitat de Catalunya este año. Así lo ha avanzado el diario económico Expansión. Se trata de la ampliación del hospital tarraconense, que lleva años de retraso y que parece que este año verá la luz.
A principios de mayo, el ente autonómico sacaba a licitación las obras para construir el nuevo edificio principal con un presupuesto inicial de 249 millones de euros. Las obras deberían comenzar a finales de este año y estar acabadas en 2028.
Actualmente, se están tramitando dos licitaciones. Una tiene que ver con las obras del propio edificio principal, que se llamará CORE, y el otro hace referencia al tema de equipamiento e instalaciones. En los dos concursos se han presentado por el momento un total de nueve alianzas constructoras de alto nivel. En el caso de la construcción del edificio principal son siete las ofertas presentadas: las de las uniones temporales de empresa (UTE) formadas por Obrascón Huarte Lain (OHLA) y Constructora Pirenaica (Copisa); Vias, Lantania y Certis; Ferrovial, Construcciones Rubau y Constructora del Cardoner; Dragados, Fomento de Construcciones y Contratas (FCC) y Acsa; Vilor y Grupo Puentes, y finalmente, Sacyr y Comsa. Justo esta última es la alianza que ha presentado la oferta más económica, con 90,94 millones de euros. Cabe recordar que el esta parte del contrato se licitó por 127 millones de euros.
La mayor parte de estas empresas también optan a llevar a cabo los trabajos de equipamiento y de instalaciones. En este caso, las propuestas presentadas son: Elecnor, Dominion y Sogesa; OHLA, Copisa y Alainsa; Acciona, Copcisa e Istem; Sacyr y Comsa; Dragados y Acsa; Vilor y Puentes y, finalmente, Cobra y FCC. Esta última es la alianza que ha presentado la oferta económica más reducida, con 89 millones de euros, teniendo en cuenta que el contrato de licitación es de 120 millones.
Pinzeladas del proyecto
El proyecto prevé un edificio principal de casi 76.000 metros cuadrados de superficie, donde se ubicarán los servicios asistenciales y de hospitalización. El edificio se articulará a través de un hall lineal donde confluirán los accesos. Al este habrá los servicios ambulatorios, y al oeste se concentrará la actividad de alta tecnología. El edificio principal contará con una planta baja, nueve plantas más por encima y dos de soterradas.
Según el proyecto, el nuevo edificio contará con un área de hospitalización para 252 pacientes, un bloque quirúrgico de 14 quirófanos, además de un hospital de día con 58 puntos de atención. También habrá 20 salas de radiodiagnóstico, así como gabinetes, admisiones, almacenes, mortuorio y despachos médicos.
Las obras de esta primera fase incluyen los trabajos arqueológicos, así como los de urbanización del entorno. Lo más destacado será la construcción de una rambla cubierta que unirá las calles Mallafré con Guillem Oliver. Esta pasarela estará destinada a los peatones y tendrá una superficie de 19.000 metros cuadrados.
Otro de los elementos a tener en cuenta en este contrato es que se valorará mucho el impacto ambiental del proyecto. La Generalitat busca garantizar la sostenibilidad con el nuevo complejo sanitario y, por eso, apuesta por la ventilación natural y la construcción de grandes zonas verdes.