Los municipios de la demarcación de Tarragona han ido, generalmente, haciendo los deberes en lo que a reducción de la deuda se refiere. Un total de 90 localidades la rebajaron entre 2019 y 2022 y ya son 78 las que no deben ni un solo euro. Por contra, hubo 43 que la aumentaron –lo cual no significa que estén gastando por encima de sus posibilidades, sino que, posiblemente, el incremento sea para financiar algún proyecto–.
Según las estadísticas sobre deuda viva de las entidades locales que publica periódicamente el Ministerio de Hacienda y Función Pública, el endeudamiento de los municipios tarraconenses con los bancos asciende, a cierre de 2022, a 410 millones de euros, lejos de los 523 de 2019, los 864 de 2015 y los 1.034 a los que se llegó en 2013 –el año del que se registran datos en el que se llegó al pico máximo–. Los consistorios han saneado la deuda en 624 millones de euros desde entonces y en 112 desde el último mandato.
Un último mandato que fue continuista con respecto a los dos anteriores (2015-2019 y 2011-2015). De hecho, desde que se aprobó, por la crisis económica, la Ley Orgánica de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera en el año 2012, las corporaciones locales han ido abrochándose los cinturones a base de diferentes medidas: dicha legislación marca un techo de gasto para que los ayuntamientos, el Estado y las Comunidades Autónomas no se endeuden por encima de sus posibilidades.
«La deuda ha bajado por las obligaciones que han forzado a reducir el déficit», Núria Bosch, catedrática de Hacienda Pública de la UB
Por otra parte, también establece que la mayor parte del superávit generado debe destinarse a la amortización de la deuda. «Tal y como está estructurada la normativa para los ayuntamientos, solo puedes endeudarte para llevar a cabo inversiones», indica el economista Juan Gallardo.
«Es una legislación que estableció un rigor presupuestario que no existía antes», argumenta Antoni Cunyat, economista y docente en la Universitat Oberta de Catalunya. Núria Bosch es catedrática de Hacienda Pública de la Universitat de Barcelona (UB), e indica que «la deuda ha ido bajando por las obligaciones que han forzado a los organismos públicos a reducir el déficit y a llevar a cabo una política centrada en la contención del gasto o en el aumento de los ingresos».
Bosch explica que algunas de las medidas se relajaron por la pandemia, que exigió a la Administración aumentar el gasto social y de apoyo a los sectores productivos: «Han tenido que proporcionarse más servicios». «Con el coronavirus, la exigencia fue menor: no se subieron impuestos o incluso se bajaron». No obstante, Cunyat explica que, a partir del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, el aumento de la inflación repercutió en los costes de los ayuntamientos: «El otro día hablaba con un exalcalde y me decía que los gastos de electricidad eran un 30% o 40% superiores a los que se habían presupuestado».
Con todo, la deuda ha seguido bajando hasta en las principales localidades de la demarcación. Siete de los diez consistorios más grandes vieron reducida, durante el último mandato, la cantidad que deben a las entidades bancarias: son Cambrils (que pasa de 17,8 millones a 9,7), Montblanc (de 2,2 millones a 1,8), Móra d’Ebre (de 4,1 a 2,8), Reus (de 155 a 88), Tarragona (de 118 a 101), Valls (de 15,7 a 12,5) y El Vendrell (de 39 a 26).
«Desde hace unos años, los organismos locales se han instalado de nuevo en un proceso de expansión de los gastos corrientes», Juan Gallardo, economista
Por otra parte, la han aumentado Amposta (de 12,2 millones a 17,8), La Ràpita (de 1,5 a 2,2) y Salou (de 2,2 a 5,3). Bien es cierto que, en el anterior mandato (el 2015-2019), las tres localidades sí que recortaron su endeudamiento: Amposta de 14,8 millones a 12,2, La Ràpita de 5,1 a 1,5 y Salou de 13,5 a 2.
A día de hoy, hasta 77 municipios de toda la demarcación de Tarragona están limpios y no deben nada. Son algunos ejemplos Almoster, Alforja, Batea, La Bisbal del Penedès, El Catllar, Gandesa, Maspujols, La Canonja o Vinyols i els Arcs. Después, las poblaciones que menos deuda por habitante tienen son La Pobla de Massaluca, Garcia, El Pinell de Brai, Aldover, Ginestar y Els Pallaresos.
En 43 municipios aumentó el endeudamiento a lo largo del pasado mandato. Las localidades que registraron un incremento más elevado fueron Constantí, Alcanar, Miravet, Santa Bàrbara y Ulldemolins. Por otra parte, Caseres, Vilanova de Prades, Ametlla de Mar y Creixell aparecen como los puntos con mayor deuda por habitante. No significa que sean municipios que gasten por encima de sus posibilidades ni que se hayan endeudado en exceso: «Hay tantos ayuntamientos que existen muchas casuísticas; una cosa es la tendencia general, pero siempre hay casos particulares analizables», expresa Bosch.
«Un nivel de endeudamiento adecuado es fundamental para impulsar proyectos ambiciosos», Núria Sicart, economista y miembro del comité ejecutivo del Col·legi d’Economistes de Catalunya
Núria Sicart, economista y miembro del comité ejecutivo del Col·legi d’Economistes de Catalunya, remarca que «la deuda tiene una traslación directa a la capacidad inversora; un nivel de endeudamiento adecuado es fundamental para impulsar proyectos ambiciosos que permitan a nuestros municipios posicionarse en el territorio y tener una mirada orientada al futuro».
En este contexto, Sicart explica que han de cumplirse dos condiciones para que un organismo local pueda endeudarse actualmente: «La ratio legal de ahorro neto debe tener signo positivo y la ratio legal de deuda viva tiene que ser menor al 110% de los ingresos corrientes; si está entre un 75% y un 110%, se necesita la autorización del Departament d’Economia i Hisenda de la Generalitat».
¿Más ingresos o menos gastos?
Hay dos vías para conseguir la estabilidad presupuestaria. Pueden aumentar los ingresos y, en consecuencia, subir los impuestos, o, por otra parte, reducir los gastos y proporcionar menos servicios. Actualmente, parece que los principales consistorios de la demarcación de Tarragona están prefiriendo la primera. De hecho, desde el año 2019 hasta el 2022, los ingresos tributarios de los entes locales aumentaron un 13,4%: de 656 millones a 745.
«Tradicionalmente, subir impuestos es más impopular políticamente: si en vez de pagar 500 euros de IBI, te viene un recibo de 800...», apunta Cunyat. El Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) es la joya de la corona: supone cerca de 62% del total de impuestos recaudados en Tarragona en el año 2021, según los últimos datos disponibles publicados por el Ministerio de Hacienda y Función Pública.
«Desde hace unos años, los organismos locales se han instalado de nuevo en un proceso de expansión de gastos corrientes que no pueden ser cubiertos con la capacidad fiscal actual; en lugar de hacer economías y racionalizar el gasto, han optado por lo más fácil: subir los impuestos, ya que la Administración Pública es la única que puede incrementar los precios sin que se reduzca la demanda», remarca Gallardo. «Lo que pasa es que estamos generando unas instituciones absolutamente despilfarradoras; he estado viendo noticias de diferentes ayuntamientos y todos dicen que tienen muchos gastos y que tienen que subir impuestos, pero no he visto ninguno que diga ‘oiga, vamos a reducir los gastos’», añade.
«Subir impuestos siempre ha sido una medida más impopular políticamente hablando», Antoni Cunyat, economista y docente en la UOC
«De la misma manera que apelas al ciudadano para que te ayude a sanear las cuentas, el contribuyente tiene que ver que tú también racionalizas el gasto, ya que hay vías para ser más eficientes, pero no veo actualmente una gestión ortodoxa», sentencia.
Todo proviene de una situación crónica: «Los ayuntamientos están infrafinanciados: prestan servicios que no deberían prestar, pero lo hacen en suplencia de otras instituciones que sí que deberían proporcionarlos», expone Bosch. «Esto contribuye a que exista una falta de financiación», añade.
En palabras de Cunyat, «como los ayuntamientos son la institución más cercana al ciudadano, a veces, hay cosas que no llegan vía Estado ni Generalitat y son los entes locales los que proveen estas prestaciones». Gallardo hace una enmienda: «Los servicios tiene que prestarlos el organismo que tenga las competencias; ¿por qué tiene que ponerse un ayuntamiento a ofrecer una asistencia sobre la que no tiene competencias si no está capacitado para mantenerla?».
«Los ayuntamientos están infrafinanciados porque, en sustitución de otras instituciones, prestan servicios que no deberían prestar», Núria Bosch, catedrática de Hacienda Pública de la UB
Es cierto que los consistorios también se han visto afectados por la inflación: «El incremento del coste energético, de los salarios [hay un aumento fijado del 2% para trabajadores públicos más un posible 0,5% vinculado al IPCA] y la legislación que obliga a los ayuntamientos a recaudar tasas que cubran el coste total de los servicios implican una subida importante del gasto», argumenta Sicart.
Bosch explica que la ley que regula el sistema a través del cual se financian las corporaciones locales fue aprobada en 1988 y, desde entonces, tan solo ha tenido una ligera reforma que empezó a aplicarse en 2004: «Debería analizarse cuál es la suficiencia de esta legislación y renovarla».
«La Administración Pública es la única que puede incrementar los precios sin que se reduzca la demanda», Juan Gallardo, economista
La decisión de aumentar los tributos en los primeros años de mandato, además de económicos, también obedece a criterios políticos: «No vas a subir los impuestos en año de elecciones... Ahora, como es el primero del mandato, los consistorios con problemas presupuestarios aprovechan para hacerlo y, en caso de que luego haya que bajarlos, se esperan al final del mandato», observa Cunyat. «También hay gobiernos municipales entrantes que se han encontrado las cuentas saneadas y han aprovechado para reducir los tributos», añade.
Gallardo comenta que «ahora, se curan en salud: plantean las subidas en el primer año para que, de cara a los próximos comicios, a la gente se le haya olvidado». Para Sicart, «hay gobiernos municipales que llevan poco más de cien días y es momento de tomar decisiones significativas, ya sea a través de aumentos impositivos o reducciones de servicios. Sin embargo, es esencial ser críticos y analizar las opciones para optimizar recursos municipales».
De todas formas, los expertos coinciden en que la situación es incierta y los consistorios han decidido actuar en consecuencia.
Municipio y deuda viva en 2022 según los datos del Ministerio de Hacienda y Función Pública
Aiguamúrcia 359.000,00 €
Albinyana 108.277,55 €
Albiol (L’) 0,00 €
Alcanar 4.557.679,00 €
Alcover 1.647.185,00 €
Aldover 6.916,11 €
Aleixar (L’) 0,00 €
Alfara de Carles 0,00 €
Alforja 0,00 €
Alió 0,00 €
Almoster 0,00 €
Altafulla 858.224,00 €
Ametlla de Mar (L’) 11.008.743,95 €
Amposta 17.885.976,00 €
Arbolí 0,00 €
Arboç (L’) 1.506.588,00 €
Argentera (L’) 40.788,44 €
Arnes 126.148,00 €
Ascó 0,00 €
Banyeres del Penedès 0,00 €
Barberà de la Conca 0,00 €
Batea 0,00 €
Bellmunt del Priorat 12.926,00 €
Bellvei 49.530,00 €
Benifallet 992.890,66 €
Benissanet 152.292,00 €
Bisbal de Falset (La) 0,00 €
Bisbal del Penedès (La) 0,00 €
Blancafort 0,00 €
Bonastre 11.914,33 €
Borges del Camp (Les) 711.002,00 €
Bot 0,00 €
Botarell 380.276,00 €
Bràfim 220.000,00 €
Cabacés 0,00 €
Cabra del Camp 0,00 €
Calafell 25.716.963,00 €
Cambrils 9.779.186,00 €
Capafonts 0,00 €
Capçanes 74.765,00 €
Caseres 430.000,00 €
Castellvell del Camp 168.425,41 €
Catllar (El) 0,00 €
Sénia (La) 1.236.628,00 €
Colldejou 87.285,00 €
Conesa 0,00 €
Constantí 4.500.129,00 €
Corbera d’Ebre 126.855,00 €
Cornudella de Montsant 441.063,00 €
Creixell 5.549.743,45 €
Cunit 1.208.533,00 €
Xerta 0,00 €
Duesaigües 0,00 €
Espluga de Francolí (L’) 556.146,00 €
Falset 1.776.558,00 €
Fatarella (La) 0,00 €
Febró (La) 0,00 €
Figuera (La) 0,00 €
Figuerola del Camp 300.000,00 €
Flix 225.174,00 €
Forès 0,00 €
Freginals 189.401,00 €
Galera (La) 0,00 €
Gandesa 0,00 €
Garcia 1.193,00 €
Garidells (Els) 0,00 €
Ginestar 9.843,68 €
Godall 106.445,00 €
Gratallops 9.167,74 €
Guiamets (Els) 56.833,00 €
Horta de Sant Joan 271.736,05 €
Lloar (El) 0,00 €
Llorac 0,00 €
Llorenç del Penedès 723.432,00 €
Margalef 20.076,00 €
Marçà 27.903,04 €
Mas de Barberans 14.485,00 €
Masdenverge 0,00 €
Masllorenç 0,00 €
Masó (La) 0,00 €
Maspujols 0,00 €
Masroig (El) 0,00 €
Milà (El) 0,00 €
Miravet 425.412,00 €
Molar (El) 0,00 €
Montblanc 1.861.671,27 €
Montbrió del Camp 58.398,30 €
Montferri 60.223,00 €
Montmell (El) 1.364.529,12 €
Mont-ral 0,00 €
Mont-roig del Camp 7.971.763,00 €
Móra d’Ebre 2.809.012,87 €
Móra la Nova 510.780,00 €
Morell (El) 2.240.879,00 €
Morera de Montsant (La) 120.016,00 €
Nou de Gaià (La) 0,00 €
Nulles 0,00 €
Palma d’Ebre (La) 0,00 €
Pallaresos (Els) 64.009,00 €
Passanant i Belltall 0,00 €
Paüls 226.992,00 €
Perafort 0,00 €
Perelló (El) 0,00 €
Piles (Les) 4.031,00 €
Pinell de Brai (El) 5.081,79 €
Pira 0,00 €
Pla de Santa Maria (El) 84.226,00 €
Pobla de Mafumet (La) 0,00 €
Pobla de Massaluca (La) 545,00 €
Pobla de Montornès (La) 0,00 €
Poboleda 254.761,00 €
Pont d’Armentera (El) 150.000,00 €
Porrera 0,00 €
Pradell de la Teixeta 0,00 €
Prades 287.428,00 €
Prat de Comte 162.242,94 €
Pratdip 0,00 €
Puigpelat 0,00 €
Querol 0,00 €
Rasquera 476.757,13 €
Renau 0,00 €
Reus 88.880.439,59 €
Riba (La) 0,00 €
Riba-roja d’Ebre 158.234,00 €
Riera de Gaià (La) 294.615,00 €
Riudecanyes 170.000,00 €
Riudecols 0,00 €
Riudoms 3.867.693,00 €
Rocafort de Queralt 0,00 €
Roda de Berà 3.328.445,00 €
Rodonyà 335.753,00 €
Roquetes 1.002.122,00 €
Rourell (El) 0,00 €
Salomó 0,00 €
La Ràpita 2.258.492,00 €
Sant Jaume dels Domenys 173.448,00 €
Santa Bàrbara 200.627,00 €
Santa Coloma de Queralt 546.410,00 €
Santa Oliva 444.845,79 €
Pontils 75.299,00 €
Sarral 268.310,00 €
Savallà del Comtat 0,00 €
Secuita (La) 772.006,70 €
Selva del Camp (La) 1.314.244,96 €
Senan 0,00 €
Solivella 235.942,00 €
Tarragona 100.814.809,39 €
Tivenys 62.806,96 €
Tivissa 1.094.379,64 €
Torre de Fontaubella (La) 33.835,00 €
Torre de l’Espanyol (La) 0,00 €
Torredembarra 8.311.844,00 €
Torroja del Priorat 0,00 €
Tortosa 27.838.754,00 €
Ulldecona 0,00 €
Ulldemolins 223.771,00 €
Vallclara 0,00 €
Vallfogona de Riucorb 0,00 €
Vallmoll 0,00 €
Valls 12.506.907,00 €
Vandellòs i l’Hospitalet de l’Infant 510.593,00 €
Vendrell (El) 26.688.388,21 €
Vespella de Gaià 0,00 €
Vilabella 48.158,00 €
Vilallonga del Camp 702.971,72 €
Vilanova d’Escornalbou 0,00 €
Vilanova de Prades 172.641,00 €
Vilaplana 0,00 €
Vila-rodona 0,00 €
Vila-seca 630.747,00 €
Vilaverd 0,00 €
Vilella Alta (La) 5.523,78 €
Vilella Baixa (La) 0,00 €
Vilalba dels Arcs 0,00 €
Vimbodí i Poblet 240.562,00 €
Vinebre 393.373,00 €
Vinyols i els Arcs 0,00 €
Deltebre 6.341.377,35 €
Sant Jaume d’Enveja 348.555,03 €
Camarles 465.629,00 €
Aldea (L’) 0,00 €
Salou 5.325.548,00 €
Ampolla (L’) 0,00 €
Canonja (La) 0,00 €