Reus planea una nueva zonificación escolar para el próximo curso 2025-2026. La propuesta en la que trabaja el Ayuntamiento, a la espera del ok de la Generalitat, divide la ciudad en cuatro zonas: las familias que vivan en cada zona hallarán dentro de ella una oferta de centros «variada» y «suficiente» en la que deberán matricular a sus hijos e hijas.
El sistema lo estrenarían los cerca de 800 alumnos que se incorporen a I3 en septiembre del año que viene, aunque aproximadamente la mitad, alrededor de 400, son hermanos de otros que ya estudian, y para ellos seguirá prevaleciendo el criterio de mantener a los hermanos juntos en una misma escuela, si es que la familia así lo quiere.
La zonificación busca frenar la segregación en Reus, equilibrar la escolarización y debería permitir una reducción de ratios frente al indeseado cierre de líneas, en palabras de la concejala de Educació, Pilar López, al Diari. Los cambios no afectarán a la matrícula viva de este curso que ya está en marcha. Y la adscripción a secundaria «no se toca» y no se verá alterada en nada.
Modelo estático
La ciudad pasará así de un modelo conocido como dinámico, en el que las prioridades de centros para los alumnos se establecían trazando un radio de influencia individualizado desde su domicilio y que «únicamente se aplicaba en Reus y en Barcelona»; a uno estático, «parecido al implantado en más ciudades», con cuatro zonas fijas y un abanico predefinido para cada una.
Eso permitirá que «a cada zona se le puedan aplicar medidas diferentes en función de sus necesidades», controlar la sobreoferta y «tratar de bajar las ratios en ciertos centros». «También implicará una detección y un diagnóstico del alumnado con necesidades específicas de apoyo educativo», destaca la responsable de Educació.
López incide en que el planteamiento, ideado «para ir a mejor», está «vivo» y es «revisable» y «ajustable» a situaciones o errores que puedan aparecer y a cambios en la densidad de población de las zonas. Se creará una comisión de seguimiento para apuntalar esa voluntad.
El traslado concreto de cada área al mapa se dará a conocer más adelante, cuando sea oficial, a finales de este 2024. Lo que ya se sabe es que la distancia máxima entre la casa de un alumno y su escuela estará entre 1,6 y 1,8 kilómetros.
La concejala explica que el cambio en la zonificación escolar, que figura en el Pla d’Acció Municipal (PAM) para este mandato, viene marcado por el decreto 11/2021 de 16 de febrero, de la programación de la oferta educativa y del procedimiento de admisión en los centros del Servei d’Educació de Catalunya, que lanza «una nueva mirada cuyos requisitos no se cumplían». Y que esta cuestión se revisó por última vez en Reus en 2012. El nuevo proyecto es similar al que rigió en la anterior etapa socialista.
Otro factor que se ha tenido en cuenta, además de la bajada del padrón, lo integran los informes del Síndic de Greuges de Catalunya sobre segregación escolar: el índice de disimilitud –la proporción que ha de cambiar de centro para lograr el equilibrio– en Reus es del 0,36, por encima del 0,33 catalán. Todas las escuelas públicas de la red de la ciudad son de alta y máxima complejidad excepto cinco.
La propuesta de nueva zonificación pasará esta semana por la Taula Local d’Educació y se elevará a la Generalitat. El equipo de trabajo que ha elaborado el documento ha sido mixto, con técnicos del Departament d’Educació y del Ayuntamiento. La concejala detalla que, en este tiempo, profesionales de educación de centros públicos y concertados han aportado su punto de vista y que los planes se presentaron al Consell Educatiu de Ciutat.
Información por carta
La entrada en vigor sería coincidiendo con las preinscripciones del curso 2025-2026. Las familias que accederían a I3 según padrón serán informadas al respecto por carta y al menos a través de la Oficina d’Escolarització Municipal (OME) y la web del Ayuntamiento.
«La escolarización de los hijos es un tema sensible y somos conscientes de que cualquier cambio angustia, pero las familias deben saber que la oferta es suficiente, que la escolarización está garantizada y que pueden estar muy tranquilas», apunta López, que destaca que «el modelo que tendremos es uno general que está en toda Catalunya».