«Los mediodías del Mercat Central han sido un fracaso», así de contundente lo dice un paradista. El pasado otoño, cuando se cumplía un año de la ampliación horaria, la iniciativa ya se había deshinchado, con muy poco seguimiento. Ahora, con el paso del tiempo, se ha acabado de apagar. Si la apuesta pasa por abrir lunes, martes, miércoles y sábado de 08 a 15.30 h; y jueves y viernes de 08 a 20 h, al mediodía todos los negocios suelen cerrar una hora antes de lo indicado. En cuanto a los jueves por la tarde, solo cinco o seis se mantienen abiertos, es decir, ni un 15% de las paradas. Para Pere Margalef, del Cal Pere, el problema es que «no se ha hecho la promoción necesaria». Para él, la idea puede ser buena, sobre todo haber ganado la tarde del jueves, «pero si no se hacen bien las cosas no funcionan, y esto es lo que ha pasado aquí», lamenta.
«Sobre las 14-14.30 h, todos vamos cerrando», cuenta el presidente de los paradistas, Ildefons Vidal. De momento, no ha habido ninguna sanción y tampoco estaría previsto. Solo hace falta dar una vuelta por el interior del mercado sobre las dos del mediodía para ver que todos ya van limpiando, barriendo, apagando luces y echando la persiana. De clientes, prácticamente no quedan. De hecho, si los paradistas cierran es, precisamente, por la falta de clientela en esta franja. «Esto pasa aquí y también en los supermercados», señala un paradista.
Hasta las 15.30 h solo restan abiertos la cafetería, ahora regentada por el Forn Sistaré bajo el nombre de Zero Gluten ADN Sistaré, y el nuevo Soho, abierto hace escasos días. Se trata de la parada de degustación de la pescadería Tarraco Sea Food. «La especialidad es el pescado, usando el producto de la propia pescadería, aunque también tenemos un apartado para otros públicos», relata Álex desde el mostrador de este nuevo punto degustación del Mercat Central.
Explica que abren a las 08 h y que es a partir de la hora del almuerzo cuando mayor movimiento de clientela tienen. Ofrecen desayunos, también servicio de cafetería, además de vermut y todo tipo de platos con pescado y marisco como protagonistas. «Nos mantenemos abiertos hasta las 15.30 h. Al mediodía, suelen venir a tomar algo paradistas del mercado, una vez han cerrado sus paradas», cuenta Álex.
Por su lado, Xavier Pàmies, del Forn Sistaré, comenta que el establecimiento que tienen en el Mercat Central permanece también abierto hasta las 15.30 h. Los jueves y viernes, la cafetería está en marcha de forma ininterrumpida de 08 a 20 h. «Nos funciona bien», explica Pàmies. Espera que la clientela se vaya animando e incluso se plantean ampliar las horas de apertura porque, como recuerda, el establecimiento funciona independientemente del mercado.
Las tardes del jueves tampoco han funcionado. «Permanecen abiertos muy pocos negocios», señala Ildefons Vidal. Los paradistas cuentan que los primeros meses «fueron bien», pero después, la actividad fue a menos hasta a día de hoy: únicamente hay abiertos cinco o seis paradas. Pere Margalef puntualiza que, en su caso, no tiene la verdulería abierta, «pero vengo cada tarde a trabajar, así que si durante esta franja del jueves viene algún cliente, lo atiendo». Así también lo hacen otros, que ven la tarde del jueves como un servicio más que para hacer negocio. En cambio, los viernes por la tarde funcionan porque con el anterior horario ya estaba en marcha.
Cuál es el motivo del «fracaso» es difícil de decir: ¿cierran las paradas por falta de clientela o porque están cerradas las paradas no van los clientes? Sea cuál sea, Margalef dice: «Falta promoción, explicar a la gente porqué es importante comprar en el comercio local. Sin una campaña así, no lo conseguiremos».