Cómo se promocionará la vivienda digna y asequible en Reus a 10 años vista o, si se contemplarán las necesidades del barrio del Carrilet en el futuro, han sido algunas de las preguntas de ciudadanos hechas este martes 29 de noviembre en la audiencia pública del plan estratégico Reus Horitzó 32. El día en el que se ha presentado el documento definitivo, ha sido descrito por muchos de los asistentes, como el día de «pasar a la acción» y «ejecutar el plan». Y como respuesta a las preguntas iniciales, la vicealcaldesa Noemí Llauradó ha expuesto que «hay diferentes actores para alcanzar el derecho a la vivienda, trabajaremos en eso, y se atenderán las necesidades de los diferentes barrios, también».
El documento, que planifica el futuro de la ciudad, se articula a partir de cuatro ejes: ciudad con calidad de vida, con oportunidades, con talento y para disfrutar. A partir de estos, se concretan 14 propósitos y, de ahí, se despliegan 38 líneas estratégicas. «Han sido 18 meses de trabajo, empezamos en plena Covid. Tuvimos que plantearnos el futuro en un momento incierto, y siempre pensando en poner a la ciudadanía en el centro. Lo hemos hecho aportando variedad de puntos de vista», ha recordado Llauradó.
El alcalde, Carles Pellicer ha dicho que el documento está hecho con «mucha estrategia», una palabra clave repetida en varios de los discursos hechos durante la audiencia pública. Uno de ellos, el del gerente general del Ayuntamiento, Josep Solé: «Planificar significa poner el foco más allá del día día y la estrategia es un principio a partir del que trabajamos».
La consultora social Mireia Faucha ha explicado que el plan estatégico está «estructurado por necesidades ciudadanas» y sigue una «metodología relacional», que ha implicado sumar a numerosos agentes productivos y han intervenido ciudadanos, grupos municipales, técnicos del ayuntamiento, empresas y otros colectivos. «Entre otras metas, está simplificar trámites administrativos y reducir la brecha digital e impulsar nuestra cultura como referente».
En el turno de aportaciones de los grupos municipales, el concejal no adscrito, Raúl Meléndez, ha manifestado que el plan «habla poco de seguridad» y que en «la diagnosis se es demasiado sutil». «Ya que el plan es dinámico, pedimos que se añada el aspecto de la seguridad», ha solicitado Meléndez. La concejala Carmina Pozuelo (PSC) ha repasado planes estratégicos del pasado y ha incidido en la importancia de ejecutarlos: «Hay que adaptar el plan a cada barrio, también». Daniel Rubio (Ara Reus) ha manifestado que «es un plan de la ciudadanía» y Daniel Recasens (ERC) que aporta «ideas claras, sin posicionamientos rígidos». Teresa Pallarès (Junts per Reus) ha destacado el «trabajo compartido» y que las acciones genéricas del documento «se irán adaptando a los cambios imprevisibles del futuro».