El Ayuntamiento de Reus ha regularizado el pago de vados en toda la ciudad, también en los polígonos, zona donde, hasta el momento, nunca habían pagado esta tasa. Según detallan fuentes municipales consultadas, se trata de una acción ya iniciada a principios del actual mandato, con una actualización de la ordenanza. Posteriormente, se procedió a realizar inspecciones en toda la ciudad con el fin de detectar irregularidades, es decir, localizar aquellos casos en los que se usan entradas y salidas de vehículos, pasando por la acera, pero sin disponer de vado. Finalmente, se ha procedido a enviar requerimientos a todos aquellos que hacen un uso irregular. Una actuación que, según el consistorio, responde, en parte, a quejas vecinales, de gente que sí paga vado que se habría quejado de casos en los que también había un uso de la acera para entrar y salir vehículos, pero sin vado. Cabe recordar que con esta tasa se paga por el hecho de poder utilizar un espacio de la vía pública, es decir, la parte de acera que el vehículo debe atravesar para poder entrar o salir de, por ejemplo, un garaje particular.
Todo ello ha cogido especialmente por sorpresa a los empresarios de los polígonos de Reus, que se muestran indignados, «no porque estemos en contra de pagar la tasa, sino por cómo se ha hecho», señala el presidente de la Associació de Polígons Industrials de Reus (APIR), Gerard Pagès. Comenta que con el consistorio se había hablado sobre esta opción, «pero no era una decisión firme». Ahora, los empresarios han recibido los requerimientos sin previo aviso, lo que ha levantado indignación en el sector. «No se ha sancionado a nadie, sino que el consistorio da la posibilidad de presentar alegaciones», puntualiza Pagès.
Los empresarios de los polígonos mantuvieron, ayer por la mañana, una reunión telemática con los concejales de Hisenda, Mariluz Caballero; Via Pública, Hipòlit Monseny; y de Empresa i Ocupació, Carles Prats. Reunión en la que se trató esta cuestión. «Por un lado, se nos ha trasladado la posibilidad de presentar alegación, ante la cual se comprobaría caso por caso», explicaba tras el encuentro con el consistorio el presidente de APIR. Otra cuestión expuesta por parte de los empresarios fue la tasa impuesta. Y es que señalan que tienen exactamente la misma tarifa que el centro de la ciudad. «Si hay seis tarifas, tenemos la número uno, como si estuviéramos en la plaza de Prim, pero nosotros no disponemos de los mismos servicios que en el centro, no tenemos una brigada cada día limpiando las calles», recordaba Pagès. En esta línea, desde el Ayuntamiento de Reus se recuerda que los empresarios de los polígonos, a pesar de estar situados en la misma franja que el centro, disponen de un 75% de bonificación.
Aun así, los empresarios remarcan que la cantidad es elevada, ascendiendo a más de 300 euros. Varios empresarios con los que ha podido hablar el Diari –que prefieren mantenerse en el anonimato– se muestran especialmente molestos por el momento en el que el Ayuntamiento ha decidido aplicar la tasa de vado: en plena pandemia.
En este sentido, Gerard Pagès recuerda que como sector no han recibido ninguna ayuda directa, «solo las ayudas ICO», por lo que el sector encuentra todavía más indignante que se les cobre una tasa jamás pagada en la capital del Baix Camp en un momento tan delicado como el actual. Por ejemplo, desde APIR se ha pedido en ocasiones medidas como la congelación de la subida del IBI o descontar las tasas municipales. Por su parte, fuentes del consistorio insisten especialmente en que no se trata de una acción iniciada ahora, sino que viene desde el inicio del mandato, cuando se empezó a trabajar por la regularización de la situación en toda la ciudad: los polígonos, pero también entre los particulares.
Otros empresarios también se quejan de que, a pesar de pagar tasas, se tienen que hacer cargo del mantenimiento de la acera si quedan dañadas por el paso de camiones.
Reus no es la única ciudad que se está poniendo al día en esta cuestión. Como ejemplo cercano hay el de Tarragona. Una ciudad que también tiene la voluntad de iniciar una inspección genérica en toda la ciudad para determinar qué usuarios están haciendo un uso inadecuado de las aceras y, por lo tanto, requeriría de vado para poder entrar y salir del garaje particular. En Tarragona, como en muchas ciudades, se da el caso que hay urbanizaciones en la que nunca se ha pagado esta tasa, como son Boscos o Cala Romana, por ejemplo.
El bus y la fibra, las prioridades
Por parte de los empresarios de los polígonos de Reus, en la reunión de ayer también se pusieron sobre la mesa otras reivindicaciones. Y es que la tasa de vado es una cuestión más que se suma a otras que desde hace tiempo se denuncian desde los polígonos de la ciudad. Destaca, por ejemplo, la falta de conexiones con el bus urbano. Solo las líneas L50 (Reus centro - Tecnoparc - Aeropuerto) y la L31 (Oques - AgroReus) dan servicio a tres polígonos: Tecnoparc, Mas de les Ànimes y AgroReus. Los trece restantes carecen de servicio. «Y en los que hay bus, las frecuencias son reducidas», se señala desde las empresas, lo que obliga a muchos trabajadores a usar el vehículo privado porque los horarios no se adecuan.
En cuanto a la fibra óptica, la otra gran batalla de los polígonos de Reus, en los últimos años se ha avanzado mucho y el despliegue se ha hecho realidad en prácticamente todas las zonas industriales de la ciudad. Aun así, ha quedado descolgado el polígono Nirsa y alguna empresa allí ubicada plantea irse dado que sin fibra óptica se pierde competitividad.
También en cuestión de limpieza y vigilancia se considera que falta un largo recorrido. Aspectos que desde APIR se pone el acento para, precisamente, evitar que las empresas se vayan de la ciudad.
