A este Reus le sale casi todo esta temporada. El de Marc Carrasco es un equipo al que este año le da igual quién se ponga por delante y en qué circunstancias. Una plantilla que está diseñada para sobreponerse y que este curso está consiguiéndolo.
Hasta dos veces le empató el Prat, pero el cuadro rojinegro impuso su ley de líder y el primer gol de Pedro Martín con la elástica rojinegra y otro tanto de Pau Russo en el añadido decidieron un nuevo triunfo reusense.
Pese a la lluvia, el público estuvo enchufado ya antes del pitido inicial, pues los jugadores del Reus Deportiu de hockey patines presentaron al Estadi la Copa del Rey conquistada la pasada semana en Calafell. Había ganas de Reus y los rojinegros salieron al verde con el plan claro, aunque les costó articularlo. El de Miguel Ángel Motoso se vio alterado cuando, en el primer minuto de partido, Guillem Corominas se lesionó y Héctor Ramos entró en su lugar.
El cuadro barcelonés compareció en el Estadi dispuesto a desplegar una propuesta atractiva. Con ganas de quitarle el balón a un Reus que se siente muy incómodo sin él, especialmente en casa. Los primeros minutos fueron eso, una lucha por la posesión sin aproximaciones ni ocasiones claras.
La primera llegó apenas se cumplían dieciséis minutos de juego, cuando un gran pase al espacio de Marc Grau tras una mala salida del Prat llegó a Joan Torrents, que recortó a Joel Bona, pero disparó fuera con la zurda a la izquierda de Aleix Ruiz.
Los de Marc Carrasco iban entrando en el partido, pero no por ello el cuadro pratense reculaba ni renunciaba al cuero. Miguel Ángel Motoso mantenía la espada en alto. El Reus la empezaba a afilar, con un Sergi Casals muy incisivo por el carril zurdo y un Ricardo Vaz inspirado.
Precisamente el luso le sirvió un caramelo a Joan Torrents en el 27’ tras una recuperación rojinegra de nuevo en la salida, pero el ‘18’ del Reus se encontró con la zaga visitante, que sacó la definición rasa antes de que entrara y mandó la bola a córner. Córner que Pol Fernández, en el primer palo, remató al travesaño.
Y de saque de esquina al palo a saque de esquina al palo. Esta vez de Xavi Molina, que, tres minutos después, remató en el segundo palo al travesaño otro centro desde la izquierda y puso de manifiesto que el Reus se había enchufado y que el Prat sufría.
Al timón, un Sandro Toscano que actuó como un verdadero mariscal en la medular rojinegra. Las ocasiones y el dominio eran reusenses, pero faltaba terminar de afinar. Lo haría Torrents en el 42’. El punta no iba a perdonar una tercera y aprovechó un pase alto vertical de Ricardo Vaz para plantarse ante Ruiz y superarlo con una picadita.
El gol fue un soplo de aire fresco para un Reus que empezaba a dominar y a bailar bajo la lluvia pese a la mínima ventaja. Tan mínima que empató el Prat en el 58’ después de que Pol Benito hubiera estado muy cerca de poner el 2-0 un minuto antes. Tras una gran acción colectiva, el ‘11’ se quedó solo ante Ruiz, lo recortó, pero la zaga la sacó bajo palos.
A la acción siguiente, una pérdida de Pol Fernández propició un pase de la muerte de Ayman Amhot para que Miguel Fernández batiera a Pepo Campanera. Tocaba remar.
Y eso hizo el Reus, que un par de minutos después volvió a ponerse por delante. Fue tras una acción embarullada dentro del área, que Xavi Molina cazó para que Ricardo Vaz cabeceara sobre la línea y así devolver la ventaja a los de Marc Carrasco.
Pero seguiría la locura. No pasaban ni cinco minutos cuando Miguel Fernández cabeceó un centro de Sergi Rosanas para volver a marcar y poner de nuevo el empate en el luminoso.
El Reus seguía gobernando el partido tras la locura, aunque veía cómo se le acababa el tiempo y las piernas respondían menos. Pero había alguien que tenía una deuda pendiente con el gol.
Era Pedro Martín, que había entrado por Torrents y que a siete para el final cazó un balón suelto fruto de un rechace entre Ruiz y la zaga potablava y marcó a puerta vacía para acercar el triunfo. Triunfo que certificó Pau Russo en el añadido para dejar claro que a este Reus le sale todo.
