Del 2 al 13 de septiembre Francisco realiza un viaje por el Lejano Oriente comenzando por Indonesia, país de 275 millones de habitantes y 17.500 islas, 6.000 de las cuales, habitables. Allí visitó la Gran Mezquita, con capacidad para 120.000 personas, que comunica por el subsuelo con la Catedral Católica por el llamado ‘Túnel de la amistad’, convertido en metáfora adecuada para el principal propósito del viaje: mejorar las relaciones con el mundo musulmán.
El Papa visita también Papúa Nueva Guinea y Timor Oriental, países muy pobres y con analfabetismo elevado, para acabar en la ciudad-estado de Singapur, que tiene el mayor PIB del mundo.
Con estos países, serán 64 los visitados por Francisco, la mayoría lejanos en todos los sentidos.