La periodista de este Diari Núria Riu, que firma la noticia sobre la primera piedra que ayer se colocó en el PP10 de Tarragona (el antiguo Barrio de la Esperanza), comentaba en la redacción «es la mejor noticia que vamos a dar este verano». La respuesta de sus colegas fue «quizás es la mejor noticia que vamos a dar este año». Hablamos de la construcción de 192 viviendas de alquiler social que el Ayuntamiento de Tarragona va a construir en los terrenos que antiguamente ocupaba el barrio de la Esperanza.
El Ayuntamiento cuenta con la colaboración y complicidad de la Fundación Salas y la Fundació Nou Lloc para la llamada promoción de Les Oliveres en un proyecto ambicioso que llega en plena crisis del acceso a la vivienda. Y por ello, todavía más, esta es sin duda una excelente noticia. Los pisos estarán distribuidos en dos edificios de catorce alturas y hay un calendario firme, con fecha para entrega de llaves. Hablamos de 2026. En dos años, las familias podrán acceder a sus nuevos hogares. Y en una época en que el acceso a la vivienda digna es uno de los mayores problemas de nuestra sociedad, la construcción de casi 200 pisos en Tarragona supone una bocanada de aire fresco. La nueva promoción busca dar respuesta a las necesidades de familias con unas rentas más bajas, pero también se fija en los jóvenes, la gente mayor y los discapacitados, colectivos que más difícil lo tiene para emanciparse. Se les reservará el 50% de los pisos.
192 familias tendrán su nuevo hogar en 2026, si se cumple el calendario establecido. Es la primera promoción en muchos años
Pero no es la solución a una cuestión que necesita medidas estructurales. Un estudio del portal Idealista ha revelado las diez localidades de España donde hay más demanda para encontrar un piso de alquiler durante el segundo trimestre de este 2024. Reus y Salou aparecen en el ‘top 10’ de ese ranking. Las administraciones deben velar por el respeto a un derecho fundamental como es el derecho a la vivienda. Con precios asequibles. Y con una oferta amplia. Dejemos que la esperanza del nuevo barrio de la Esperanza se extienda y esperemos que el calendario siga su camino sin contratiempos. Es la primera piedra de una gran oportunidad.
