Una disputa entre dos familias –una de ellas venida hace unos años de fuera de Catalunya– parece estar detrás de la muerte de un hombre –y de otros dos que resultaron heridos– a primeras horas de la tarde de hoy martes en el barrio tarraconense de Campclar, justo al lado de la comisaría de los Mossos d’Esquadra.
Los motivos se desconocen. Incluso los propios vecinos no se ponían de acuerdo sobre el origen del conflicto. Un conflicto que en poco más de dos horas estaba ya controlado por la Policía catalana, que acordonó la zona, incluso con unidades procedentes de otras comisarías.
Despliegue sin precedentes
Sobre la una de la tarde, los propios agentes que se encontraban en las dependencias centrales del Camp de Tarragona de los Mossos d’Esquadra escucharon unos disparos. Ello hizo disparar todas las alarmas y una movilización de urgencia sin precedentes en este edificio oficial. Los policías que se encontraban en las dependencias –incluso unos que asistían a un curso de atención a la víctima– comenzaron a movilizarse, a la vez que se solicitaban a las patrullas de servicio que se desplazaran a la zona.
Incluso las de otras comisarías, como así lo hicieron dotaciones de Cambrils, Falset y Reus. También agentes de las unidades de Trànsit, del ARRO o de investigación. En aquellos momentos incluso se pensaba que habían mossos heridos. La Guàrdia Urbana se sumó también al dispositivo así como un helicóptero de los Mossos, que llegó sobre las dos de la tarde.
Los efectivos policiales se desplegaron alrededor de la zona, un espacio situado al lado de la calle Riu Brugent.
Con la llegada de los agentes del ARRO, el cerco se aproximó más hacia el piso donde, según los testigos, habrían huido los sospechosos de los disparos. Con la llegada de más efectivos, las patrullas que se habían desplazado desde otras comisarías regresaron a su ámbito de actuación.
Asalto al piso
Ante la previsión de que se tuviera que asaltar el domicilio, desde Barcelona se desplazaron a la zona agentes de los GEI (Grup Especial d’Intervenció), que llegaron poco antes de las dos y media de la tarde. Sin embargo, finalmente, su intervención no fue necesaria. Los agentes del ARRO entraron en el piso y localizaron a las diez personas que se encontraban. Fueron trasladadas a la comisaría para que los agentes de la Divisió d’Investigació Criminal les tomaran declaración. Finalmente, han sido detenidas seis, de entre 19 y 50 años. La investigación, pero, sigue abierta,
Paralelamente, el hombre herido de disparo, de unos 55 años –los dos heridos son más jóvenes–, era atendido por el personal médico del SEM. Sin embargo, nada pudieron hacer para salvarle la vida. Fue subido a una ambulancia, que seguidamente se desplazó hasta el interior del recinto policial.
Allí, sobre las tres y cuarto de la tarde, fue llevado a un vehículo de los servicios funerarios y trasladado al edificio del Institut de Medicina Legal i Ciències Forenses para que posiblemente mañana miércoles dos médicos le practiquen la autopsia.
Los heridos
Paralelamente, otras dos personas resultaron heridas, aunque no se teme por su vida. Una de ellas, según algunas fuentes, recibió golpes en una calle cercana al lugar del tiroteo. Fueron evacuadas a sendos centros hospitalarios. Uno ha sido intervenido quirúrgicamente por heridas de bala en diferentes partes del cuerpo. Una de las ambulancias ha sido escoltada por los Mossos hasta el hospital.
Mientras la zona estaba acordonada, los vecinos de los pisos no podían entrar ni salir de sus hogares. Los alumnos del cercano Col·legi Mediterrani tampoco lo pudieron hacer.
A las tres de la tarde, la situación estaba bajo control, informaban los mossos. La zona estaba tranquila. Unas pocas decenas de personas seguían el trabajo policial, algunas desde el otro lado de la antigua carretera N-340.
A pie de calle se había constituido un Centre de Comandament Avançat con los responsables de las diferentes unidades policiales con el objetivo de dirigir el operativo. Mientras, desde la Sala Central, en el complejo Egara, en Sabadell, se constituyó una sala de crisis con los comisarios, que estaban en contacto con los mandos que se encontraban sobre el terreno. A través de la cámara instalada en el helicóptero y otras de los agentes les llegaban imágenes de lo que estaba pasando.
Muerte ‘oficial’
No ha sido hasta las 15.53 horas cuando los Mossos d’Esquadra han informado oficialmente de que había una persona muerta. Y ello a pesar de que desde hacía media horas había un coche de la funeraria a la puerta de la comisaría. A las dependencias policiales han sido trasladados por parte de la grúa municipal dos vehículos que se hallaban en el lugar del tiroteo.
Con la situación ya más calmada, el intendente responsable de la Regió Policial del Camp de Tarragona de los Mossos d’Esquadra, Vicenç Lleonart, daba algunos detalles de un caso que, como recordó en diversas ocasiones de su intervención, está bajo secreto de sumario. Informaba de la pelea «entre dos grupos de personas”. Sobre las diez que estaban en el domicilio al que han accedido los agentes del ARRO, dijo que se les está interrogando “para saber el grado de implicación en la pelea». Se han decomisado dos armas de fuego: una corta –tipo pistola o revólver– y otra larga –escopeta–.
Asimismo, destacó que se está en contacto con instituciones, entidades y medidores para informarles de la situación. Durante esta noche y las siguientes habrá en el barrio un dispositivo especial de seguridad –conjuntamente con la Guàrdia Urbana– para prevenir posibles nuevos incidentes «y dar más tranquilidad a los vecinos».