El Pla de la Seu, enfrente de la Catedral de Tarragona, ha vuelto a quedarse pequeño para ver salir a todos los elementos del Seguici Popular para escoltar a la reliquia del brazo de Santa Tecla.
Los cerca de 860 metros cuadrados que mide esta plaza, que está declarada como Bien Cultural de Interés Local (BCIL), se han vuelto a convertir en el epicentro del tarragonisme cuando las campanas de la Catedral han llamado a procesión.
Muchos llevaban ya un buen rato guardando y no se moverán para esperar el momento culminante de las fiestas cuando el brazo regrese definitivamente a la Catedral.
La reliquia de la santa, el Braç, que llegó a Tarragona el 17 de mayo de 1321 (hace ahora 703 años), procedente de Armenia, es el elemento central de todos los actos de esta tarde.
Toda la fiesta, pero especialmente en este momento, a los tarraconenses los transporta a un punto de sentimiento de ciudad que es imposible captar en ningún otro momento del año
La reliquia ha salido de la Catedral a las 20 horas bajo la atenta mirada de los presentes. A lo largo del recorrido, miles de tarraconenses y vecinos de otras localidades se han citado en cada esquina, acera, balcón o ventana del recorrido para presenciar los elementos del Seguici y disfrutar, en según que partes de este itinerario, de los bailes, exhibiciones y cánticos.
La fiesta se está desarrollando con normalidad y respeto para que todo el mundo pueda disfrutar de cada momento de la procesión cuando pasa por su lado. Los asistentes de la Festa per a Tothom también han podido vivir de cerca todos los elementos del seguici.
Ha sido unos minutos después de las 21:00 horas, cuando se ha vivido el momento más esperado y mágico de la noche. El Braç de Santa Tecla ha entrado de nuevo en la Catedral bajo los aplausos de los presentes, los elementos festivos y el confeti dorado.
(Seguirá ampliación)