Han pasado 48 horas desde las elecciones. ¿Qué sensaciones tiene?
Pues que tengo la consciencia muy tranquila. No hemos generado ni un solo problema a la ciudad ni tenemos nada que esconder, sino que hay una gran satisfacción porque dejamos listas muchas inversiones para ejecutar en el próximo mandato. Espero que el nuevo gobierno no dilate nada.
¿Qué pasó? Han bajado un concejal, la CUP ha desaparecido y han perdido la alcaldía.
Ha pasado en todo el país, pero sin que sea una justificación, en Tarragona es donde se ha aguantado mejor. Mucha gente del sector independentista no acudió a votar, debemos aceptarlo.
¿Por qué cree que el soberanismo no acudió a las urnas?
Estamos digiriendo el 1 d’octubre, y los partidos no hemos sido capaces de gestionar una lectura compartida de ello. La gente teníamos unas expectativas que no se han cumplido, y el electorado nos ha castigado.
Quizás el independentismo no ha ido a votar porque en campaña no se ha hablado de independencia...
Se ha hablado poco, ya que lo que importa es cómo avanza la ciudad en el momento clave del POUM en el que nos encontramos. Debíamos contraponer modelos y valores, pero no votar para que ganen los que van en contra de lo que tu quieres tampoco es demasiado práctico.
En campaña tuvo una polémica con Sendra (Junts) por un posible pacto con el PSC. ¿Estas peleas han frenado al votante independentista?
No lo sé, hay cosas concretas que pueden haber influido, pero está claro que hay dinámicas supramunicipales que afectan: unas veces han ayudado y ahora nos han penalizado.
¿El independentismo debe reflexionar tras el 28M?
El gran problema es que ya hace mucho tiempo que entre todos hemos sido incapaces de encontrar una estrategia compartida. Deberíamos buscar un mínimo común denominador.
Junts pide una lista unitaria para las Generales del 23 de julio
Es que no es una cuestión de hacer cosas puntuales y tácticas, sino de construir una estrategia amplia. Esto, en Tarragona, donde no domina el independentismo, es especialmente importante. Aquí, durante el Procés, logramos una unidad de acción entre instituciones, partidos y entidades.
En Tarragona ahora hay un gobierno entre ERC, Junts y CUP y han bajado igualmente
Sí, pero ahora deberemos consolidarlo fuera del Ayuntamiento. Debemos recuperar la voluntad compartida de llegar a más gente.
Haga autocrítica. ¿Qué han hecho mal?
Igual deberíamos haber tejido más redes, pero no sé... Es que hemos hecho una gestión honesta, transparente, buenísima y muy efectiva que espero que no se estropee en el futuro. El próximo mandato se verán grandes inversiones pese a haber sufrido la pandemia.
¿Se va satisfecho con el trabajo realizado?
Sí, lo que sufro para que no se malbarate. A nivel personal también estoy contento con las áreas que he llevado: Cultura y Turisme.
¿Qué teme que se tire atrás?
Viñuales dudaba sobre Memòria Històrica porque decía que el franquismo quedaba muy lejos, sobre la lengua cuestionó los premios literarios de Òmnium...
¿Cómo valora la entrada de Vox?
Es preocupante. Y más si pueden condicionar las políticas municipales en temas en los que habíamos llegado a consensos muy amplios, como en los derechos de las personas homosexuales, transexuales, Memòria Històrica...
¿Debe hacerse un frente común para invisibilizarlos?
No debemos acomplejarnos ni dejar de defender lo que defendemos. No debe contarse con ellos para nada.
Miquel Pueyo, alcalde en funciones de Lleida de ERC que ha perdido las elecciones, ha anunciado que dimite. ¿Qué hará usted?
Estoy tranquilo, ya que lo que haga yo particularmente tiene muy poca relevancia porque lo importante es formar el nuevo grupo municipal y repartirnos las tareas de forma organizada. Tendremos un equipo potentísimo para lograr que dentro de cuatro años Tarragona vuelva a ser republicana. Ahora lo importante es esto, y dentro de un tiempo ya decidiremos. No tengo ningún otro pensamiento.
¿Recogerá el acta de concejal el 17 de junio?
¡Claro! No hay motivo para no hacerlo. Recogeré el acta y me pondré a disposición del alcalde por el bien de la ciudad para todos aquellos temas que son menos visibles. Y luego haremos una fiscalización crítica desde el grupo, ya que somos la única alternativa clara.
¿Liderará la oposición?
Sí, claro.
No hará, pues, como Ballesteros (PSC), que ha estado los cuatro años en un segundo plano.
No. Ahora toda mi voluntad es preparar bien el grupo municipal para el futuro. Y después, ya veremos.
Para resumir: recogerá el acta, empezará el mandato y luego ya veremos si está los cuatro años como concejal.
Lo que tengo clarísimo es que en 2027 no me presentaré. Y, a partir de aquí, de manera coordinada y sin ninguna presión, decidiremos qué es lo mejor para el grupo. Somos un equipo.
¿Qué actitud mantendrán desde la oposición?
De crítica muy constructiva. Nos preocupan algunas declaraciones de Viñuales, estaremos atentos.
¿Qué le preocupa?
Ya piensa en el POUM en términos de pedir prórrogas para las normas transitorias, lo que genera una gran inseguridad jurídica y de falta de vivienda. Volvemos a la típica parálisis socialista, que ya llevó a retrasar un año los Juegos. Con el avance del plan ya aprobado se prevén más de 5.600 pisos de protección. ¿Merece la pena paralizarlo por unos planes parciales muy especiales?
¿Budellera, Vall del Llorito y Mas Sorder?
Sí, pero se encontrarán con la dinámica de la revisión de Plans no Sostenibles de la Generalitat. También me preocupan las dudas del PSC sobre el tranvía.
A Viñuales no le gusta el trazado por la ciudad.
El trazado es discutible, claro. Pero también habla de apostar por concesiones de autobuses... El tranvía es la articulación de la movilidad del área metropolitana. ¿Qué pasará si a Tarragona no le interesa pero al resto de municipios sí? Sería otro error histórico. Entre esto y el frenazo del POUM podemos situarnos en un punto de difícil retorno. Y también quiere frenar los carriles bici.
Prioriza las conexiones entre campus de la URV
Pues hemos firmado el traspaso de carreteras que permitirá el carril bici hasta Altafulla y, además, tenemos los planes de desarrollo turísticos que también los impulsan para potenciar la descarbonización. Todo esto nos preocupa.
Tienen voluntad de fiscalización constructiva, pero los primeros pasos lo dificultan.
Es preocupante. Como la comisaría de Battestini, que también se cuestiona. Igual quiere paralizarlo todo, como la Residencial. Tarragona puede volver al siglo XX.
¿Avalarán que se recupere el proyecto del Rambla Science del Banco de España?
Me hace gracia que primero diga que había dinero para ello y que ahora pida fondos europeos.
¿Qué le piden al nuevo gobierno?
Que no frenen los temas iniciados y que no paralicen la ciudad. Si no lo hacen nos tendrán a su lado.
Retirarán la acusación particular de Inipro. ¿Qué le parece?
No está bien. Entramos en el caso cuando acabó la instrucción. Se da la circunstancia de que el Ayuntamiento es un damnificado con más de 300.000 euros. Es necesario defender los intereses de la ciudad. ¿Si te entran a robar en casa no denunciarás?
En una reciente entrevista en este periódico usted alertó que «Tarragona no puede volver a estar en manos de las élites». ¿Lo estará?
Hay apoyos que pasan una factura. Parece que el gran problema que puede llevar a paralizar la tramitación del POUM es hacer un gran plan parcial en Terres Cavades. También se pide la paralización del tranvía porque a las concesionarias del transporte no les gusta.
¿El PSC hace de lobbysta?
Ya hemos visto la relación con la empresa de la basura. El futuro alcalde empieza con mochilas.
¿Le ha afectado esta polémica?
Es un tema de forma que se puede arreglar con un acuerdo de pleno. Nosotros este tema ya no lo trataremos. Ahora bien, si quieren paralizarlo podemos tener un problema de varios años. Se puede perder el medio millón de los Next Generation para la recogida selectiva, por lo que subirá la factura y la tasa.
¿Qué valoración hace de estos cuatro años como alcalde?
Me voy con una gran satisfacción personal. Ser alcalde ha sido un maravilloso regalo que me ha dado la vida. Junto con el nacimiento de mis hijos y de mis nietos, ha sido lo mejor que he vivido. No hemos contratado ni hemos colocado a nadie de nuestro entorno. Ni hemos generado ninguna red clientelar y hemos desbloqueado temas como la Ciutat de Repòs, el Joan XXIII o el Fòrum Judicial, además de avanzar en el traslado del ICAC a la Tabacalera para que los Xiquets tengan local, la rotonda del polígono Entrevies, la bilioteca en la Tabacalera y la marcha de la CLH.
Lo que no han podido desbloquear es el parking Jaume I.
No, pero hemos hecho mucho más que nuestros antecesores: llevar al Banco Santander a la justicia. Espero que no se arruguen para reclamar los daños económicos.
¿Con qué se queda?
Han sido cuatro años difíciles: la pandemia, Iqoxe, el POUM, el Amfiteatre que se caía... Hemos gestionado con honradez situaciones muy complicadas, siendo resolutivos escuchando a la gente.
¿Cuál ha sido el mejor momento desde 2019?
Es muy emocionante ver la llegada de los Pilars Caminant. Estar en el Balcó y ayudar a que suba la enxaneta es una sensación brutal. Como celebrar las 700 Tecles apostando y poniendo en valor a nuestros creadores y entidades de la ciudad.
Su leivmotiv era hacer de la cultura un motor de la ciudad. ¿Lo ha logrado?
Estoy contento de los dos años que estuve en Cultura. Fuimos valientes, recuperamos el Camp de Mart cuando en toda Catalunya la cultura estaba parada por la Covid. También hicimos una ópera que dinamizó la industria del entorno artístico local.
¿Deja una ciudad mejor que la de 2019?
Sí, no tengo ninguna duda de ello.
¿En qué ha mejorado?
Hemos desencallado muchos temas pendientes con valores de transparencia y participación.
¿Qué asignatura le ha quedado pendiente?
Muchas, como las bibliotecas de Torreforta y Sant Pere i Sant Pau. Están en trámite pero me hubiera gustado verlas inauguradas.
¿Qué legado deja?
La ciudad es mejor habiendo trabajado con honestidad y respeto para todo el mundo.
Solo ha sido cuatro años alcalde. Recasens lo fue 10, Nadal 18 y Ballesteros 12.
Las circunstancias son complejas, no tenemos la capacidad de gasto de antes. El PSC nos endeudó en 47 millones y nosotros hemos bajado la deuda en 24.