Lucy, víctima de violencia de género: «Hemos sufrido muchos obstáculos tras el asesinato a mi hermana»

Ella se hizo cargo de sus sobrinos después del crimen machista de Guacimara. Expone las dificultades de lo que no se ve y todas las trabas burocráticas que la familia ha tenido que soportar a lo largo de la última década

31 julio 2024 18:16 | Actualizado a 01 agosto 2024 14:00
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Guacimara Rodríguez, la hermana de Lucy, fue asesinada el 20 de febrero de 2013 cuando se disponía a salir a trabajar. El culpable, su expareja, la esperó en el rellano, la cogió por detrás y la mató delante de sus hijos y de su madre.

«No había ninguna denuncia previa y, según se descubrió al tiempo, no se habían producido episodios de violencia física, pero sí psicológica, algo erróneamente normalizado», explica hoy Lucy, quien afirma que se quedaron «en estado de shock». «Nunca piensas que va a ocurrirte a ti», expone.

«Nunca piensas que va a ocurrirte a ti», Lucy Rodríguez, víctima de violencia de género

Fue el inicio de una historia que no ha dejado de doler. Y es que la violencia machista ni empieza ni acaba en los asesinatos. «Te ves con todo esto y, cuando quieres comenzar a caminar, ves que o hay nadie que te diga ‘empieza por aquí’, tienes que ir tocando puertas, tirando...».

Lucy se vio con su madre y dos menores a cargo después del trágico suceso. «Lo primero que me dijeron en la Dirección General de Derechos de la Infancia y de la Adolescencia es que tenían que hablar con el padre, por lo que me sorprendí y lo primero que hice fue ir al juzgado con el objetivo de pedir la retirada de la patria potestad», algo que consiguieron de forma provisional hasta la celebración del juicio.

Lucy es canaria, pero ha participado en un proyecto de investigación comandado por la URV

Para recibir la tutela y tramitar pensión de orfandad, los trámites provocaron que tuvieran que pasar ocho meses: «Hasta entonces, no hay ningún tipo de ayuda ni de cobertura», denuncia Lucy, residente en Canarias, pero participante en el proyecto FEMMINOR de la Universitat Rovira i Virgili (URV), dirigido por la investigadora tarraconense Eva Zafra.

«Todo son problemas para cosas simples como puede ser un simple cambio de colegio o una visita médica», argumenta Lucy, quien también tuvo dificultades para afrontar la gestión de las propiedades de su hermana: «Tenía una casa, un coche... y tienes que hacerte cargo de todo porque los seguros no te cubren hasta que no pasan unos meses durante los cuales debes entregar más documentación».

«Todo son problemas para cosas simples como un simple cambio de colegio o una visita médica», Lucy Rodríguez, víctima de violencia de género

Es un laberinto burocrático infinito e invisibilizado en muchas ocasiones. «A mi hermana le quedaba poco de hipoteca y yo fui a liquidarla, pero me pusieron una penalización por pagar por adelantado», recuerda. «La parte de la casa que era de él salió a subasta pública y, por suerte, no se presentó nadie, pero también tuve problemas con la Agencia Tributaria para poder conseguirla».

Lucy no abonaba la contribución ni la tasa de basuras, pues venía a nombre de él. «En consecuencia, cuando mi sobrino cumplió dieciocho años [ahora tiene diecinueve], le llegó a él toda la deuda acumulada». «Además, hemos tenido que hacernos cargo del abogado del juicio penal y del que lleva el tema de la custodia: son dos abogados, dos procuradores y dos notarios», denuncia.

Según apunta Zafra, las consecuencias infantiles de violencia de género están empezando a tratarse en las aulas

Finalmente, el asesino fue condenado, en septiembre de 2014, a veintitrés años de prisión y diez de alejamiento hacia los niños y la madre y hermanos de Lucy. Por otra parte, se le obligó a hacer frente a una indemnización a la familia, pero se declaró insolvente y no la cubrió.

La investigación, necesaria

A pesar de ser canaria, Lucy ha colaborado con el proyecto FEMMINOR, que se inició en 2019 y busca analizar las repercusiones del feminicidio por violencia de género en las necesidades y derechos de los hijos e hijas de las víctimas.

«No hay asociaciones ni grupos que investiguen este tipo de temas», Eva Zafra, investigadora principal del proyecto FEMMINOR

Para llevarlo a cabo, las investigadoras han recogido infinidad de casos reales. «Hemos descubierto que no hay asociaciones ni grupos que investiguen este tipo de temas, tan solo el Fondo de Becas Soledad Cazorla, vinculado a la Fundación Mujeres», apunta Zafra.

El proyecto ha evidenciado que «todas las familias entrevistadas tienen dificultades en los mismos términos que Lucy, ya que parece que la violencia de género se termine en los asesinatos y no es así: se mantiene en el tiempo y sus consecuencias llegan al resto de la familia y de la sociedad».

Zafra explica que «cada Comunidad Autónoma tiene unas ayudas específicas; en Catalunya, eran muy escasas, pero, a raíz de la reformulación legislativa que se llevó a cabo el año pasado [en la que el grupo de FEMMINOR participó para evidenciar su investigación], se han aumentado».

Las investigadoras han recogido infinidad de casos reales

En la actualidad, el proyecto ya está comparando la situación catalana con la de otros territorios del Estado para conocer similitudes y diferencias a través de entrevistas a nuevos casos humanos, relacionados también con feminicidios vinculados, llamados también episodios de violencia vicaria.

También pretende cocrear una herramienta proactiva de formación y sensibilización a través de la producción transdisciplinaria de conocimiento para que se puedan visibilizar, reflexionar y dar respuestas integrales a la problemática a nivel individual y familiar (hijos, hijas y familiares), pero también a nivel sociopolítico e institucional.

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