Ya hay fecha aproximada para las elecciones de La Sang. Todo apunta a que los congregantes podrán escoger sus representantes a finales de noviembre. La convocatoria llega después de que el pasado mes de julio, el arzobispo de Tarragona, Joan Planellas, suspendiera las elecciones justo el día antes de celebrarse. Lo hizo alegando que el proceso electoral estaba teniendo irregularidades. La más destacada era que una de las candidaturas no podía acceder con normalidad al censo.
Con todo este revuelo y con denuncias cruzadas entre las dos candidaturas que se presentaron, el arzobispo optó por anular los comicios y posponerlos para después del verano. Hace unas semanas, Planellas nombró al abogado Alfred Ventosa para que cumpliera las funciones de prefecto en el proceso electoral. Ventosa sustituye temporalmente a mosén Josep Queraltó, quien el arzobispo habría decidido apartar por tener varios conflictos abiertos dentro de la congregación. Cabe recordar que el cargo de prefecto es escogido directamente por el Arzobispado.
Ayer, los congregantes de la Puríssima Sang recibían una carta de parte de la junta electoral, que informaba de la convocatoria de elecciones. El plazo para presentar candidaturas empezaba ayer y acabará el próximo 30 de octubre, a las ocho de la tarde. Se puede hacer de forma presencial o telemática. Los únicos requisitos para presentarse como subprefecto son tener una antigüedad de, como mínimo, dos años, y estar al corriente de pago. El comunicado no concreta la fecha exacta de los comicios, ya que, en el caso de que solo se presente una solo candidatura, no se celebrarán elecciones.
Según ha podido saber el Diari, todo indica que se volverán a presentar las dos candidaturas que tenían previsto hacerlo el pasado mes de julio. Una estaría liderada por Ramon Mullerat, quien ha ejercido de subprefecto durante el último año, después de que la junta dimitiera en noviembre de 2023. La otra candidatura estaría liderada por Maria Grau.
En la carta que se ha enviado a los congregantes, Ventosa explica que la junta electoral está trabajando para aprobar el censo electoral, tema que había generado cierto malestar durante el primer proceso electoral. La candidatura dirigida por Grau denunció en ese momento que no le facilitaban consultar el censo. Ahora, la junta concreta cómo hacerlo para poder consultarlo, ya sea de manera presencial o telemática.
Denuncias cruzadas
Hace meses que La Sang arrastra un ambiente caldeado. El período electoral del pasado mes de julio estuvo marcado por las denuncias cruzadas entre las dos candidaturas. Mullerat pidió al arzobispo que impugnara la lista de Maria Grau por ser concejal del Ayuntamiento de Els Pallaresos. Y es que un artículo de la ley canónica recomienda a las congregaciones no tener presidentes que se dediquen a la política. Grau argumentaba que optaba al cargo de subprefecta o vicepresidenta, y no de prefecta o presidenta.
Por su parte, Grau también denunció ante el Arzobispado que la junta electoral –en ese momento capitaneada por mosén Queraltó– no le facilitaba el censo electoral.
Por todo ello, Planellas optó por anular los comicios y volver a empezar el proceso electoral.