«Es un gran edificio emblemático y «arquitectónicamente precioso». Así calificada el futuro Palau de la Justícia de Tarragona, Félix Bolaños, ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes durante la visita que ha realizado este jueves a la ciudad, donde se ha reunido con el alcalde, Rubén Viñuales.
El ministro ha visitado primero el ayuntamiento, donde ha firmado en el Libro de Honor. Posteriormente se ha trasladado al solar situado en la confluencia de las calles Guillem Oliver y Pont i Gol, donde a finales de este año está previsto que comience la construcción del nuevo Palau de la Justícia. Allí ha saludado, entre otros, al presidente de la Audiencia Provincial, Joan Perarnau, y a la fiscal jefe de la Audiencia, María José Osuna.
Rubén Viñuales destacaba la importancia que este equipamiento tiene para la ciudad, mientras que el conseller Ramon Espadaler destacaba que en este caso se han «alineado» todas las administraciones implicadas.
El ministro Bolaños apuntó que «estamos en la mayor transformación de la Justicia», en referencia a la Ley de Eficiencia del Sector Servicio Público de Justicia para hacer que esta sea «más justicia, cercana, digital y ágil». Y para que ello sea posible se necesita la reforma.
Sobre uno de estos ejes, la digitalización, señaló que el Gobierno central había transferido 400 millones a las comunidades autónomas que tienen competencias en la materia para poder materializarlo.
Sobre el Palau de la Justícia de Tarragona –cuyo proyecto había conocido durante su estancia en el ayuntamiento– manifestó que será «uno de los mejores de España».
El conseller Espadaler no aportó ningún dato nuevo sobre el complejo y todo sigue como estaba previsto. Se prevé licitar próximamente el proyecto, comenzar las obras entre finales de este año y principios de 2026, y que entre en funcionamiento a finales de 2028.