Talento e impacto social. Éstas serán las principales claves de la rentabilidad empresarial en la era de la Cuarta Revolución Industrial según las proyecciones de Deloitte a partir de su encuesta Success personified in the Fourth Industrial Revolution, una encuesta realizada a más de 2.000 cargos directivos de 19 países, presentada recientemente en el Foro Económico Mundial celebrado en Davos.
En su informe, Deloitte destaca que los ejecutivos tienen hoy una visión clara del reto que representa la Cuarta Revolución Industrial pero que, sin embargo, los obstáculos organizativos parecen limitar el desarrollo de las estrategias relacionadas con la incorporación a la Industria 4.0, con la mayoría de empresas evitando todavía «inversiones clave en tecnología que impulsarían la innovación y la disrupción».
Talento
Los resultados del estudio reflejan que cada vez más los ejecutivos están siendo conscientes del desajuste futuro entre las nuevas habilidades requeridas en los empleos de la Industria 4.0 y la fuerza de trabajo existente. Actualmente, menos de 5 de cada 10 directivos afirman que se está haciendo todo lo posible para crear fuerza laboral acorde con la Industria 4.0. Por contra, un año atrás creían que sí se estaba haciendo todo lo posible, con casi 9 de cada 10 encuestados.
En paralelo, los directivos confían más en acceder al talento necesario a través de la formación de sus actuales plantillas (el 43%) que a través de nuevas contrataciones (25%). Además, un 57% afirma que el sistema educativo necesita ser rediseñado para preparar a las personas para la Industria 4.0.
Impacto social
Junto al talento, el impacto social es la segunda clave de futuro en la que estos directivos coinciden de forma mayoritaria cuando analizan la transición hacia la Industria 4.0. A día de hoy, el impacto social es el factor más importante para las organizaciones para medir su desempeño anual, por encima de la satisfacción de clientes y de empleados.
Un 73% de los encuestados (el 68% tomando como muestra sólo los directivos españoles) afirma haber hecho cambios o desarrollos en sus productos o servicios en el último año con el objetivo de generar un impacto social positivo. Más de la mitad indica, además, que han generado nuevos ingresos como resultado de ello.
La oportunidad de generar nuevos ingresos y la sostenibilidad y crecimiento del negocio son las dos razones principales aducidas por los directivos para decidir emprender iniciativas con impacto social. A estas motivaciones les siguen la cultura de la organización, las expectativas de los clientes y diferenciarse de la competencia, entre otras.
En base a las respuestas de esta encuesta, Deloitte establece cuatro perfiles de líderes entre aquellos que están encarando medidas efectivas para la transición hacia la Industria 4.0 de sus respectivas empresas.
- Comprometidos con «hacer el bien». El impacto social hasta sus últimas consecuencias. Este perfil de líder considera las iniciativas sociales fundamentales para sus negocios. «Hacerlo bien haciendo el bien» es su lema, y son celosos de utilizar las tecnologías que proporciona la Industria 4.0 de una manera ética. Eso debe llevar a sus empresas a generar nuevos productos o servicios con conciencia social o ambiental que, al final del camino, derivarán en nuevos ingresos.
- Metódicos. Con una visión clara del próximo paso, son metódicos en el despliegue de su estrategia para transitar hacia la Industria 4.0. El seguimiento estricto de procesos claramente definidos y el uso de datos para tomar decisiones destacan por encima de la media de otras empresas.
- Inversores con visión a largo plazo. Decididos a afrontar inversiones en tecnologías de Industria 4.0 para lograr disrupciones futuras en sus respectivos mercados. Su visión a largo plazo les lleva a pensar en una carrera de fondo en la que un día recogerán los frutos de esta apuesta estratégica.
- Convencidos del talento. Están convencidos de que el talento es la clave, y por eso sus esfuerzos se encaminan a formar y preparar a sus colaboradores para el futuro que llega. Son los más confiados en la preparación de sus equipos.