«Puedo venir los dos días y no aburrirme ninguno de ellos». Con estas palabras, Eduard e Ivet, ambos de Masllorenç, describían ayer el ambiente que se respiraba en la primera edición del salón Tarraco Manga, una iniciativa conjunta de la Associació Starraco Unlimited y el Palau Firal i de Congressos de Tarragona, donde hasta hoy se celebra el encuentro.
Más de 12.000 metros cuadrados en los que, durante el fin de semana, los aficionados al mundo del manga, anime y videojuegos pueden hacer realidad todos sus sueños, como fotografiarse junto al Espíritu del bosque, del filme La princesa Mononoke, cuya «apariencia principal de ciervo y rodeado de Kodomas, que son otros espíritus del folklore japonés, representa la naturaleza y su pureza, y de ahí que cure los demonios del gigantesco jabalí que aparece endiablado»; o al lado de los míticos personajes de la serie de televisión Dragon Ball; sin olvidar el gran photocall dedicado a One Piece Red, la nueva entrega cinematográfica de la serie de animación japonesa. «En Tarraco Manga somos los primeros en estrenar la publicidad del filme que llegará a los cines en noviembre, una de las series más antiguas y con más seguidores», destacó el director de Tarraco Manga, Ivan Carrasco.
Mientras, las aventuras de Goku han marcado la infancia y adolescencia de toda una generación de seguidores. «Cuando era pequeño veía series de anime en la televisión, como Dragon Ball, y en la adolescencia las volví a ver. Y cuando algunas de ellas dejaron de tener la versión traducida a nuestro idioma, tuve que empezar a verlas en japonés. Desde entonces, nunca he dejado de ser un aficionado», rememoraba Eduard. Por su parte, Ivet recordaba que «he crecido mirando esta serie mientras cenaba».
Ahora, sus gustos han madurado a la vez que han evolucionado las series anime. «Años atrás las producciones se centraban en el manga shonen -dirigido a los chicos adolescentes y de aventuras y batallas-, mientras que hoy en día existen incluso series para ver en pareja», explica Eduard.
Así, tanto él como Ivet no dejan escapar la oportunidad de visitar los salones especializados «para quedar con otros aficionados, a la vez que conseguir objetos artesanales, como dibujos o personajes hechos con hama beads». En este sentido, la zona de merchandising es un completo escaparate y una parada obligatoria para encontrar piezas de coleccionista. Del mismo modo, el salón es también un punto de encuentro para los cosplayers, que dan vida a una larga lista de personajes como Son Goku, Kakashi, Itachi... Y de estos últimos es seguidora la joven Alba, a sus diez años, quien ayer acudió al salón Tarraco Manga acompañada de su padre, Marc.
«Soy fan de muchas series, como Naruto y My Hero Academia, y mis personajes favoritos son Kakashi y Itachi, porque este último fue capaz de acabar con todo su clan», explicaba Alba, quien decía que «descubrí el manga y el anime gracias a mi hermano». Por su parte, el tarraconense David acudió caracterizado de Son Goku.
‘Show de streamers’
Por otro lado, quienes ayer visitaron al salón Tarraco Manga pudieron ver en directo un show de streamers de League of Legends y Valorant. Entre los y las participantes estaba la streamer barcelonesa ‘Meawfflescat’. «Me llamó la atención poder compartir conocimientos y habilidades con gente que no conoces», afirmaba la joven de 33 años. En este sentido, resaltaba que «es muy importante saber comunicarte con el público para poder crear tu propia comunidad, porque de lo contrario no habrá nadie que te apoye». Asimismo, reconocía ‘Meawfflescat’ que «si te lo tomas en serio, tanto delante como detrás de la cámara, hay muchas horas de dedicación».
Por otra parte, el salón Tarraco Manga es una cita obligada para los nostálgicos gammers. Por ello, bajo el lema ‘soy friki, soy cultura’, desde la asociación El Gato de Vader, Carlos Acedo reivindicaba que «el género fantástico, mal llamado friki, es cultura». «Ahora están de moda series como Juego de Tronos y todo tipo de videojuegos de manga y anime, pero no hay que olvidar que tienen una base literaria, es decir, la parte lúdica tiene su origen en una parte cultural, por lo que queremos volver a aunar ambos caminos», reconocía Carlos Acedo.
Él mismo rememoraba que «mientras que ahora los jóvenes se quedan encerrados en sus habitaciones, las antiguas salas recreativas de videojuegos eran espacios en los que se socializaba con otros jugadores». Por ello, una colección de veinte máquinas de las décadas de los ochenta y noventa, entre ellas las Nintendo NES, Super Nintendo y Master System, invitan al público a revivir este espíritu, echando una partida con estas auténticas joyas.