Ocho meses después de revalidar su alcaldía, esta vez con mayoría absoluta, Pere Segura presentaba el pasado mes de febrero un ambicioso Pla d’Actuació Municipal (PAM) para el período 2023-2027. Una hoja de ruta que recoge las promesas electorales de Vila-seca Segura y que incluye un total de 219 medidas concretas, calendarizadas a lo largo del mandato. Medidas que van desde inversiones puntuales en el espacio urbano a acciones como colaborar para la llegada de Hard Rock, del tranvía o de nuevos inversores a la ZAL o al centro comercial Nou Port.
La primera de todas las acciones incluidas en el PAM es la redacción de un nuevo POUM, un nuevo ordenamiento urbanístico para substituir el actual plan de 1993. El Ayuntamiento llegó a sacar a licitación los trabajos para la redacción del documento, pero el proceso se anuló tras un recurso del Col·legi d’Enginyers de Camins. Ahora, se ha tenido que convocar de nuevo el concurso y difícilmente culminará el mandato con un nuevo POUM.
Una de las primeras acciones de gobierno fue crear la marca Cultura Vila-seca para englobar la programación del Celler, el Castell y el Auditori Josep Carreras. El impulso a todos estos equipamientos y eventos como la FiM mantienen a Vila-seca como referente cultural en el territorio.
En este primer año de mandato se ha seguido desplegando el nuevo contrato de la basura, que culminará este mes con los nuevos contenedores móviles del Centre Històric y, además, se ha aprobado una nueva ordenanza de civismo que persigue acabar con el incivismo en el espacio público.
En los últimos meses, también se han acabado algunos de los proyectos que venían del anterior mandato, como los circuitos ciclables del Parc de la Torre d’en Dolça, el nuevo local de ensayo de los Xiquets de Vila-seca o la fase de demoliciones del Estadi Municipal.
Precisamente la transformación del Estadi es el proyecto al que más esfuerzo presupuestario dedicará el Ayuntamiento los próximos años. De momento, se está redactando el proyecto constructivo y pasarán todavía bastantes meses para que volvamos a ver máquinas trabajando. En materia deportiva, al prometido pabellón ligero –sigue sin concretarse– se une la promesa de una piscina lúdica al aire libre en Vila-seca.
