Los ‘policías’ de Vila-seca que vigilan a los amos de mascotas

El Ayuntamiento pone en marcha una campaña informativa para recordar las obligaciones de tener un animal de compañía

12 octubre 2020 09:27 | Actualizado a 12 octubre 2020 09:33
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Vila-seca siempre ha puesto en marcha campañas de civismo con un ‘extra’ de información y de tiempo para que las obligaciones ciudadanas se digieran de forma entendible y se actúe en beneficio de la convivencia en la ciudad. Así se hizo en muchas ocasiones en el tema de residuos, logrando con el tiempo resultados de separación de basura realmente envidiables a nivel de Catalunya.

Las campañas informativas que complementan las ordenanzas municipales permiten llegar a la gran mayoría de vecinos implicados y lograr que las incidencias sean mínimas y se reduzcan de forma progresiva con el tiempo. Ahora, la información extra se lleva a cabo para potenciar qué se puede hacer y qué no con las mascotas en Vila-seca.

El Ayuntamiento ha puesto hace pocos días una nueva edición de la campaña “+Vila-neta, +civisme”, dirigida a incentivar la tenencia responsable de los animales de compañía. Además de la notificación personal y distribución de información y de una tarjeta identificativa personalizada a los más de 2.500 propietarios de animales inscritos al censo municipal, el consistorio ha activado un equipo humano de informadores cívicos que a pie de calle está realizando sesiones informativas, vigilancia y control de los espacios públicos del municipio.

Distribuidos por varias zonas y en horarios especiales, estos informadores entregan también una botellita para diluir orines y un dispensador de bolsas para la recogida de excrementos.

Con el lema «Si tienes un animal de compañía, sé responsable», el objetivo de la campaña es el de fomentar hábitos de respeto para la conservación del espacio urbano, a la vez que permitirá actualizar el registro del Censo Municipal.

En el pleno de agosto se aprobó por unanimidad una nueva ordenanza sobre la protección y la tenencia responsable de animales de compañía. La nueva ordenanza, que prevé sanciones de hasta 20.000 euros para los propietarios que la incumplan, exige que los perros, gatos y hurones deben de estar registrados al censo municipal, identificarlos con un chip y asegurarlos unas condiciones higiénicas y sanitarias adecuadas.

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