La exsecretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha negado este lunes la existencia de la Operación Catalunya y la guerra sucia contra el independentismo a través de la policía patriótica. Durante su comparecencia en la comisión de investigación del Congreso, ha asegurado que la Operación Catalunya es “una ficción y nunca ha existido”. También ha negado haber hablado con el excomisario Villarejo sobre Catalunya y ha señalado que los audios que ha publicado este lunes RAC1 “están editados”. A pesar de las grabaciones, ha afirmado que ella “nunca” encargó ninguna actuación para utilizar policías y jueces con el fin de perseguir el independentismo.
En estas conversaciones de 2014, Cospedal y el excomisario hablan abiertamente de la guerra sucia contra el independentismo y de pagos a Vicky Álvarez, expareja de Oriol Pujol Ferrusola.
También de presiones a la Audiencia Nacional para que impulsara procesos judiciales contra Artur Mas y Jordi Pujol, así como del papel de la exlíder del PPC, Alícia Sánchez-Camacho, que comparece en esta misma comisión este lunes a las 15 h.
Además, estos audios también apuntan a que el exalcalde de Sabadell, Manel Bustos, habría actuado como informador de la policía patriótica.
A preguntas del diputado de Bildu Jon Iñarritu, De Cospedal ha afirmado que no ha escuchado los audios difundidos por RAC1 y ha insistido en que después de tantos años “de audios, no audios y manipulaciones”, ni siquiera “se ha interesado” por las grabaciones. Además, ha afirmado que nunca habló de Catalunya ni de Alícia Sánchez-Camacho con Villarejo y ha negado la veracidad de los audios, que deben haber sido “editados”.
“Yo me fío más de mi memoria que de lo que diga un medio de comunicación o de las transcripciones de una conversación que no sé si ha sido manipulada”, ha dicho, porque “no tengo por qué aceptarlo si no hay una custodia de esa grabación”.
En este contexto, ha negado de manera tajante que sus actividades hayan supuesto algún peligro para la democracia española, pero ha admitido que se reunió “entre seis y ocho o nueve veces” con el excomisario Villarejo en calidad de secretaria general del PP.
En todo caso, ha afirmado que cuando se reunió con Villarejo, este “no estaba en activo” como policía nacional, a pesar de que Villarejo se jubiló en 2016 y las reuniones tuvieron lugar en los años anteriores.
Eran “una o dos reuniones por año como mucho”, en las que, según la ex número dos del PP, trataban “temas de actualidad”, y Villarejo “nunca dijo nada que no fuera de dominio público y estuviera previamente publicado”.
También ha puesto en duda la existencia de una orden para investigar la cúpula de Podemos, a pesar de que se realizaron cientos de búsquedas en el sistema policial sobre los líderes de esta formación.
Además, ha afirmado que el término ‘policía política’ “es una creación ficticia que nunca ha existido” y ha recordado que ella no tenía “nada que ver con el Ministerio del Interior”. “Yo pongo en duda que esa policía política haya existido”, ha reiterado.
A preguntas del diputado de Junts, Josep Pagès, ha negado categóricamente y ha afirmado que ella “nunca encargó” ninguna operación para utilizar policías y jueces con el fin de perseguir el independentismo.
También ha afirmado que “no conoce” de nada al exalcalde de Sabadell, Manuel Bustos, ni tiene conocimiento de pagos a Javier de la Rosa.
Además, ha asegurado que durante su mandato ni ordenó ni se hizo efectivo el pago de 50.000 euros a Vicky Álvarez del que habla con Villarejo en el audio difundido por RAC1.
Ha afirmado que tampoco “recuerda” ninguna conversación con Villarejo sobre Pablo Iglesias y ha asegurado que ella “no tenía interés en obtener ninguna información sobre Podemos en absoluto”.