La plaga de sarna que mató al 86% de los ejemplares de cabras montés del Port d’Arnes está “muy controlada”.
Es el primer año que en el censo de población no se ha detectado ningún ejemplar con síntomas de haber sufrido la enfermedad y el año pasado solo se divisó una.
Atendiendo criterios veterinarios, la especie ha logrado la resistencia de grupo y el grado epidemiológico de la enfermedad es bajo. Aunque se produjera algún “rebrote puntual”, se descarta una mortalidad como la causada por el parásito de la sarna entre 2015 y 2021, cuando en el Port se pasó de 3.600 ejemplares a 500.
En el censo de este año se han contado 844 ejemplares de cabra montés, un crecimiento que confirma la recuperación y regeneración de la especie. La reproducción se ha disparado desde 2022.
Desde la Reserva Nacional de Caça se muestran “optimistas” y están “más tranquilos”, a pesar de que no “bajan la guardia”.
Que “haya muy pocos animales o ninguno con síntomas - visibles - indica que está muy controlada”, como ha destacado Josep Jovaní, jefe de la sección de Activitats Cinegètiques i Pesca Continental de Terres de l’Ebre y director técnico de la Reserva Nacional de Caça del Port. Jovaní ha remarcado que la “situación” de la población de cabra montés del Port ya es “totalmente diferente”.