Hay jugadores que son necesarios. Futbolistas al servicio del equipo que se adaptan a sus necesidades sin ceder en sus prestaciones. Son esos elegidos por los entrenadores para aportar el equilibrio al equipo. Para sostener la media de valoración, porque saben que su actuación pocas veces bajará del notable. Y en esa franja son rentables incluso sin necesidad de ofrecer el excelente. Son como seguros de vida para garantizar los mínimos. Con suerta y mucho ojo las plantillas tienen uno o dos. Raül Agné posee tres, e incluso se podrían añadir un par más. Pero los más claros, y sus titularidades así lo demuestran, son Manu García, Alex Quintanilla y Robert Simón. De ninguno se recuerda un mal partido. Costaría encontrar fisuras en su rendimiento global. Entre los tres futbolistas sumaron 112 partidos. Robert lo jugó todo (40 partidos), Manu García casi (38 partidos) y Álex Quintanilla solo se perdió 6 choques. El 96,43% de esos partidos fueron titulares.
Pocas cosas quedan por decir de Manu García. El meta sevillano es, si no el mejor portero de la categoría, uno de los mejores. La pasada temporada salvó más puntos con sus paradas que cualquiera de los delanteros con sus goles. Sus intervenciones generan seguridad al equipo y aunque este curso todavía no haya podido dejar la portería a cero, contribuyó, eso sí, a que en ambos se sumaran dos puntos, sigue siendo un guardameta de lo más fiable. Por eso el club grana no tuvo reparos en aumentar sus emulentos para retenerlo en el Nou Estadi. El mercado no ofrecía nada mejor que Manu García, porque es difícil encontrar algún portero que supere al sevillano en la categoría de bronce.
Tampoco es sorpresa que Alex Quintanilla sea el jefe de la defensa. Posee el equilibrio necesario para mantener la línea ordenada. En el uno contra uno es tenaz y firme. Difícil superarle. Además de ofrecer altura (1,85 m) para las acciones a balón parado. La temporada pasada marcó dos goles -fueron tres, otro en Balaídos ante el Villarreal B, pero se lo anularon-, y contribuyó a mejorar las acciones de estrategia. En ataque y sobre todo en defensa.
Solo cuando hay ‘tangana’ o roces con algún rival, surge un Quintanilla más canchero. Pero incluso esos momentos de pique con el contrario suelen tener su sentido práctico para la escuadra grana. Más de un delantero se ha llevado un amarilla e incluso roja por caer en las tentaciones del bilbaíno. No hay nada como la veteranía para saber sacar provecho también de la inocencia y la ira del rival. Pura astucia.
Robert Simón no se perdió ni un partido la temporada pasada. Los jugó todos. El único futbolista de la plantilla que participó en los 40 encuentros, entre liga regular y play-off. A excepción de cuatro de ellos, todos fueron en el equipo de partida. Unos datos que solo se pueden permitir futbolistas que aporten una regularidad inmutable. Pese al cansancio acumulado en el tramo final de curso, en el que perdió frescura, Robert Simón acabó la temporada con cuatro goles y cinco asistencias. Más que suficiente para considerar al extremo badalonense como uno de los futbolistas más fiables de la plantilla.
Tan es así, que pese a las lesiones que ha sufrido esta pretemporada (de poca consideración, eso sí) ha podido comenzar de inicio. Igual que Manu y Quintanilla su rendimiento no ha bajado ni un ápice en este arranque. Siempre por encima del notable. Simón, además, añade un gol, el que supuso el empate frente al UD Logroñés.
Marc Montalvo y Joan Oriol
A la lista de jugadores fiables se podría añadir algún jugador más. Joan Oriol ofreció un nivel altísimo durante todo el curso, con apenas dos partidos perdidos, pero esta temporada la lesión ha impedido que pueda seguir mostrando su regularidad. Igual que Pedro del Campo. El figuerense acabó la campaña siendo también una pieza consolidada y segura, pero no así al inicio del curso.
Otro que va camino de convertirse en un jugador de rendimiento continuado es Marc Montalvo. Desde pretemporada ha sido uno de los mejores con unas actuaciones muy sostenidas en la excelencia. Falta por ver si consigue alargarlo tanto como sus tres compañeros.
Los tres fueron titulares en más del 96% de los partidos de la pasada temporada, contando play-off
