La temporada 2023/24 el Nàstic tendrá un presupuesto de alrededor de un millón de euros. El Consejo de Administración, encabezado por el presidente, Josep Maria Andreu, ha decidido abandonar los ambiciosos proyectos de entre 2 y 3 millones de euros que no han dado resultado alguno, para preparar plantillas más económicas, con objetivos más humildes.
En los últimos años, las cuentas del club arrojaban déficits cercanos al millón y medio. Una cantidad que la directiva ha tenido que hacer frente con constantes ampliaciones de capital y otros préstamos, propios y de inversores extranjeros como el empresario sueco Fredrik Wester. El CEO de Paradox acumula 4,9 millones de euros invertidos en el Nàstic. Una situación que desde la SAD no pueden mantener durante más tiempo. La decepción que ha supuesto esta temporada, con el equipo alejado de las opciones de ascender de categoría, ha hecho replantear la situación.
La reducción inicial que planteaba la entidad era sobre un 35% del coste que tuvo el curso pasado la primera plantilla, unos tres millones de euros, según explicaron en la última Junta de Accionistas. Sin embargo, el recorte será aún mayor. El objetivo es poder hacer un equipo competitivo con una tercera parte de lo que ha supuesto la temporada recién cerrada. Sobre un millón de euros.
La implicación que supone esta rebaja del coste de la primera plantilla, principalmente, repercutirá en todos los aspectos de la temporada 2023/24. En primer lugar, las incorporaciones o renovaciones. Los sueldos que ofrecerá el club grana estará lejos de los que estaba poniendo encima de la mesa. Eso indica que las renovaciones, si es que se lleva a cabo alguna, serán a la baja.
De momento, no se ha previsto ampliar el contrato de ninguno de los futbolistas que finalizan su vinculación con el Nàstic este mes de junio. Si hubiera interés de mantener alguno de ellos, sería con nuevas negociaciones y con cantidades sensiblemente inferiores. Es lo que se les ha ido informando a los propios jugadores estos días o se hará en las próximas horas.
El club grana tampoco entrerá en subastas de futbolistas, como ha ido haciendo en las últimas temporadas. Con ofertas y contraofertas para superar propuesas de otros clubes. Se ofrecerá lo que se pueda y si no, se buscarán alternativas.
Esta reducción presupuestaria afectará también al perfil de jugadores que está buscando la secretaria técnica y que conformarán la plantilla de la próxima temporada. El objetivo ahora son jugadores jóvenes con ganas de crecer. Un paso similar al que hizo la pasada temporada el CE Sabadell, aunque quizás no tan extremo.
Obviamente, eso no quiere decir que no se vaya a fichar jugadores con experiencia, pero controlando el gasto en salarios. Son cifras de partida. El mercado acaba dictando los precios y aunque uno quiera estrechar la manga, la realidad pueda llevar a tener que incrementar el gasto previsto. En cualquier caso, no se llegaría a las cotas de los últimos años. Con dinerales que no han tenido el efecto deseado con el regreso del equipo al fútbol profesional.
En este sentido, la disminución de la inversión también conlleva menos presión y una ambición comedida. El Nàstic siempre aspira al máximo, pero con presupuestos más sobrios, objetivos más acordes. Una realidad que pasa porque todo el entorno (club, plantilla, afición, etc.) lo asuma.
Semana que viene cargada
La Junta Directiva ha dejado pasar esta semana post-final de temporada antes de acometer las primeras decisiones sobre la próxima temporada. La primera será respecto a la continuidad o no de Dani Vidal. El técnico tarraconense tiene números de seguir en el banquillo del Nou Estadi, pero todavía no hay nada definitivo.
También habrá incorporaciones en la secretaría técnica. Una figura que vendrá a acompañar a Sergi Parés a la hora de incorporar nuevos futbolistas.