Sebastià Masdeu nació en Tarragona en 1889. Con apenas 22 años se convirtió en ganador de la primera Volta Ciclista a Catalunya en 1911. La cita se recuerda como la «volta del frío», disputada del 6 al 8 de enero en tres etapas: Barcelona-Tarragona, Tarragona-Lleida y Lleida-Barcelona. Masdeu, alias Tarraco, luchó el triunfo con otros dos ases del ciclismo estatal de la época, el vasco Vicente Blanco, el Cojo, campeón de España en 1908 y 1909, y sobre todo con el barcelonés Josep Magdalena, doble campeón estatal en 1910 y 1912 y vencedor de la segunda Volta.
El ciclismo fue uno de los grandes motores para el desarrollo del periodismo deportivo a principios del siglo XX. Gracias a las crónicas de antaño, podemos revivir cómo fue el triunfo de Masdeu.
La salida desde Barcelona está afectada, como buena parte de la carrera, por el frío, el barro y la lluvia. Las caídas y estado deplorable de la vía hace que solo queden diez corredores en el grupo de cabeza ya en Viladecans. Por las cuestas del Garraf en el paso de la Mala dona, se producen ataques entre los nueve en pugna. En la última pendiente solo quedan siete, entre ellos Masdeu y Magdalena. Tras la salida del control en El Vendrell, ambos protagonizan un a lucha que Tarraco decanta de su lado en la Rambla de Tarragona. Victoria de etapa, con tres segundos de renta, en el estreno de la Volta.
Sebastià Masdeu, nieto de Tarraco, con el que comparte nombre y apellido, explica una anécdota de aquella etapa: «Mi abuelo llevaba un bigote muy característico de la época. Aquel día antes de salir de Barcelona se lo afeitó y cuando venció en Tarragona casi nadie lo reconocía».
La segunda etapa entre Tarragona y Lleida tiene como cumbre destacada el Coll de Lilla. Masdeu siempre está en el grupo de favoritos y Magdalena sufre una pájara antes de les Borges Blanques. En los Camps Elisis ilerdenses vence Cesareo Ruiz, mientras que Vicente Blanco, que acabaría tercero de la general, es segundo, y Masdeu llega tercero, aumentando su ventaja sobre Magdalena a 2’ 43’’.
En una entrevista del año 1959 en la publicación Vida deportiva, el propio Masdeu explica que camino a Lleida un perro le hizo caer, se lastimó la rodilla y se la curaron en una masía con un anís que le intentaron cobrar.
La tercera etapa mantiene el pulso entre Masdeu, Magdalena y Blanco, este último más descolgado en la general. Después de Porquerisas, los dos primeros sufren un encontronazo y acaban en la cuneta. Siguen sin dolencias físicas o desperfectos en las bicis, pero cerca de Jorba, Tarraco tiene otro imprevisto que explicaría en varías ocasiones: Los tres mandan en cabeza junto a José Pérez Melero y al cruzar una riera del río Anoia, Masdeu se clava en el badén del Cunill a causa del barro. Pierde una zapatilla, pero un payés le deja su alpargata para que pueda seguir pedaleando.
El tarraconense alcanza a sus rivales pero paga caro su esfuerzo en la ascensión a Can Massana y se queda atrás. Realiza un descenso espectacular en el Coll del Bruc para entrar en cabeza en el velódromo del barrio barcelonés de Sants. Blanco, Magdalena y Masdeu se disputan el triunfo de etapa al sprint, siendo más rápido el tarraconense. Así fue cómo Sebastià Masdeu ganó la primera Volta con una zapatilla y una alpargata.
Tarraco finaliza la Volta con un tiempo de 15 horas, 30 minutos y 40 segundos. Por detrás, Magdalena es segundo (15h33’26’’) y Blanco tercero (15h48’35’’). En esta primera edición partieron de Barcelona 44 ciclistas y tan solo 22 finalizaron la prueba. Según contaba el propio Masdeu, en aquella carrera acumuló en premios 925 pesetas de la época.
Un apasionado del Tour
«Para él fue un gran éxito deportivo y económico», explica su nieto, que añade: «Era un apasionado al ciclismo que incluso no pudo competir en algunas carreras por ser demasiado joven». Su afición era tal que en una ocasión fue a ver el Tour al sur Francia con apenas 18 años y 12 pesetas en el bolsillo. Así lo cuenta en unas antiguas declaraciones a Mundo Deportivo, en que revive cómo contra la voluntad de sus padres, que regentaban una tienda-estanco en Tarragona, se escapó con su bici Sanromà para ver algunas etapas galas. Se quedó sin dinero y los ciclistas Crupelant y Georget, que estaban corriendo la Grande Boucle, le invitaron a cenar en Perpignan. Ya en Burdeos, debutó en una carrera de aficionados en la que ganó 50 francos. Los otros corredores se quejaron porque no tenía la edad mínima para participar.
Como ciclista, en 1908 Masdeu participó en la primera Volta a Tarragona, que se convirtió en la segunda prueba ciclista por etapas del mundo tras el Tour, finalizando en sexta posición y entre otros logros fue tercero en el Campeonato de España de ruta de 1911. Además, tras la Guerra Civil, en 1939, fue nombrado director de la Volta a Catalunya.
El próximo día 27 de marzola Volta parte de Tarragona, donde se rendirá homenaje a la figura de Masdeu. En el kilómetro cien de la etapa habrá un sprint intermedio en su honor y el ganador de la etapa también será recompensado con un trofeo en recuerdo de Tarraco. El primer ganador de una Volta centenaria.