La bibliotecaria y documentalista Rosa Maria Martínez Ascaso, de Ripollet pero vallense de adopción, es especialista en William Shakespeare, con una biblioteca particular de más de 3.000 libros sobre el autor inglés. Su último libro es Rere el somriure de Shakespeare (Cossetània), en el que ahonda en los elementos humorísticos de las obras del dramaturgo, tal vez no tan conocidos, «aunque tienen una influencia espectactacular en sus textos», dice la autora. Por ello, en su cuarta obra sobre el autor inglés, cuyo prólogo es de Genís Sinca y las ilustraciones de Jordi Figuerola, analiza «el espíritu lúdico de Shakespeare, a la vez que instintivamente irónico, sarcástico y satírico». Rosa Maria Martínez Ascaso también es coautora, junto con A. Usandizaga, del libro Bibliografía de traducciones españolas de las obras de William Shakespeare (1989), publicado por el Consell Superior d’Investigacions Científiques. Asimismo, con Cossetània ha publicado otros dos ejemplares: Shakespeare i la Natura. Inspiració i Simbolisme (2009) y Sexpeare. Amor i sexe en Shakespeare (2019).
¿Cuándo descubrió la obra de William Shakespeare?
A los 14 años mi padre me regaló el libro Trabajos de amor perdidos, que no es el más relevante del dramaturgo, ya que lo son Hamlet, Macbeth y Romeo y Julieta. En aquella época, yo era una fanática de la lectura por la influencia de mi madre, que era maestra, y de mi abuelo médico, quien tenía una biblioteca muy extensa. He de reconocer que con doce años leía obras que, con esa edad, no debería leer. Así, un día leí La dama de las camelias de Alexander Dumas y poco después descubrí que estaba en la lista de publicaciones que se recogían en el Index librorum prohibitorum y que se consideraban libros contrarios a la fe. Inmediatamente, pensé que había cometido un pecado, a pesar de mi amor por los libros.
¿Qué le cautivó de la comedia ‘Trabajos de amor perdidos’?
La fluidez del libro y que, a pesar de ser una obra cómica, tiene un poso existencialista, a través de la manera del autor de describir los personajes y la forma en que cobran vida.
¿Qué despertó su interés por el sentido del humor de Shakespeare?
Es un tema que no se ha tratado demasiado, pero que se puede percibir en los textos del dramaturgo, desde las comedias hasta las tragedias, y en las que tiene personajes secundarios que llaman mucho la atención. Durante los largos años que llevo conviviendo con Shakespeare, me he dado cuenta de que era una persona traviesa y con mucho sentido del humor.
Empezó a escribir el libro en marzo de 2020. ¿Qué refugió encontró en el sentido del humor del autor inglés durante el confinamiento?
Podríamos decir que el humor de Shakespeare fue predecesor del estilo de Groucho Marx, es decir, el escritor inglés tenía un sentido del humor irreverente y rompedor, pero, en el fondo, muy inteligente. Como anécdota y en el contexto del confinamiento, en el libro destaco como Shakespeare, que falleció en 1616 a los 52 años, sobrevivió a siete pestes que en aquella época eran pandemias mortales.
Las ilustraciones de Jordi Figuerola destacan la faceta de ‘alquimista’ del autor inglés.
Sí. Metafóricamente, creo que Shakespeare fue un alquimista científico y literario porque, como digo en el libro, consiguió, por ejemplo, la eternidad de sus obras.
El autor es más conocido por su faceta trágica que por su cariz humorístico.
Verdaderamente, William Shakespeare fue una persona muy determinista, es decir, creía en el destino y no era una optimista. Por lo contrario, el dramaturgo era consciente de que el humor es curativo, un pensamiento que transmite en algunas de sus obras, avanzándose a las actuales teorías científicas que señalan que la risoterapia es terapéutica.
Esto demuestra que tener sentido del humor y ser optimista no debe ser un todo en uno.
No. Las frases más impactantes de Shakespeare son en un sentido serio, no lúdico, ya que su trasfondo es trágico. La vida es un cuento explicado por un idiota lleno de ruido y de furia, y que no significa nada; o todo el mundo es un escenario, y todos, hombres y mujeres, son meros actores. Todos tienen sus entradas y salidas, y cada hombre en su vida representa muchos papeles son expresiones rotundas y sensacionales que te ponen el vello de punta.
Destaca que el humor de Shakespeare no es monolítico.
No es monolítico porque es irónico, sarcástico y satírico. Además, destaca por un tipo de humor político, erótico, impertinente, del absurdo, misógino y feminista. Después, también sobresale por su humor negro. Por ello, he de destacar que Shakespeare es inagotable, como el autor más importante de toda la historia de la humanidad.
En la publicación, también destaca que, a través de la luz cómica, Shakespeare es capaz de descubrir los aspectos oscuros del ser humano.
En realidad, muchas veces el humor de Shakespeare es una crítica. En la obra Trabajos de amor perdidos dos de los protagonistas, un maestro y un cura, compiten entre ellos para ver quien dice el latinismo más relevante, y de este modo critica la pedantería. Por lo general, Shakespeare fue un crítico subliminal de muchos aspectos de la sociedad.
¿Esto hace que la faceta humorística de Shakespeare no tenga fecha de caducidad?
Sí, es una de las causas. Todos nos podemos ver reflejados en muchos de los personajes de sus obras, ya que el autor trata todos los rasgos del ser humano, desde la ambición hasta los celos, incluso la crueldad. Sobre este último aspecto destaca la obra Titus Andronicus, además de muchos de sus personajes. Por ello, he llegado a la conclusión de que todos nosotros tenemos muchas facetas y he descubierto, a través de Shakespeare, que en nuestro interior habitan muchos personajes: el optimista y el pesimista, el que tiene buena fe y el que elige la maldad, y que muchas veces se enfrentan a situaciones desconcertantes.
¿Cuál es la obra que ha releído más veces y por qué?
Hamlet, ya que como obra dramática es muy completa. También he de decir que entre las que más me gustan destacan las cómicas La comedia de las equivocaciones y Las alegres comadres de Windsor que tienen escenas que, representadas en un teatro, son muy hilarantes. Por todo ello, cuando las vuelvo a leer siempre advierto una faceta nueva del autor inglés.
Por esta razón ya prepara un quinto libro.
Sí, y creo que será espectacular porque la temática será también inédita.