Mont-roig del Camp abrirá en los próximos días la segunda fase de la renovada avenida Barcelona. Desde abril del año pasado, el tramo de la antigua N-340 que discurre entre las avenidas Málaga y Cádiz ha estado en obras para continuar con la reurbanización de esta arteria que parte en dos el núcleo de Miami Platja. Los trabajos están prácticamente listos y esta última semana se ha acabado de asfaltar el pavimento, los trabajos de jardinería y se ha empezado a definir la pintura horizontal de los carriles bici y la calzada. Aunque solo restan pequeños detalles, la vía sigue cortada al tráfico y desde el consistorio todavía no han concretado una fecha para su apertura.
Mientras, vecinos y comerciantes de la zona celebran la transformación urbanística y de movilidad que vivirá esta parte de Miami, en el extremo más próximo a L’Hospitalet de l’Infant, y auguran un resurgir del comercio y la restauración, que actualmente se encuentra bajo mínimos. La transformación de la plaza Jaén, con un nuevo parque infantil, es la parte más aplaudida, mientras que las críticas se centran en la pérdida de plazas para aparcar.
«Esto antes no era un sitio apto para ir andando y ahora invita a pasear. Ya se ve mucha más gente, aunque todavía están las vallas. Una vez las retiren será un sitio completamente distinto», expresan Juan y Carmen, que viven muy cerca del tramo de avenida en obras. A pesar de las molestias que han sufrido durante los últimos meses, admiten que «era necesario hacer algo y ha valido la pena, porque esto estaba muerte. Pensábamos que nunca íbamos a ver este cambio».
En la misma línea se expresan Felipe y Eva, que pasan temporadas en una segunda residencia que tienen en Miami. «Hace más de 20 años que venimos. Parece mentira que esta sea la misma carretera que iba llena de camiones, con semáforos, humos... Cuando abran, toda esta zona ganará mucho en comercio y restaurantes, igual que ha pasado en la otra parte».
Dorothea, que es alemana y lleva dos años afincada en Miami desde su jubilación, considera que «esta es una zona donde vienen muchos turistas, familias con niños, y quitar coches para ganar espacio para las personas es una gran idea. Va a ser un cambio muy grande para toda la zona».
Mónica es vecina de la urbanización de El Casalot y, aunque admite que las obras de la avenida son un gran plus para Miami, cree que «las inversiones se deberían repartir un poco más por todas las zonas. Mientras aquí están remodelando y dejando bonita toda la avenida, en las urbanizaciones hay calles sin asfaltar, con baches, hay deficiencias en el servicio de limpieza, de basura...».
Plazas de aparcamiento
En el tramo de avenida que se ha reurbanizado se encuentran equipamientos como el centro de salud o la oficina de Base, pero las persianas bajadas y los locales vacíos son mayoría. «Esto supone un cambio radical que era muy necesario. Toda la vida hemos escuchado que íbamos a tener una avenida en condiciones y, ahora que por fin se va a hacer realidad, seguro que traerá nuevos negocios», comenta una de las pocas comerciantes que continúa en la zona, Carmen Durán, del centro de estética Ros Roger. Asegura que ya se ha notado el interés por algunos de los locales vacíos de su alrededor, mientras expresa una de las preocupaciones más recurrentes entre comerciantes y vecinos: «Han quitado muchas plazas de aparcamiento. Miami es un pueblo donde la gente se mueve mucho en coche y será necesario buscar otros espacios para que no se convierta en un problema».
Precisamente, dinamizar el comercio de la zona es uno de los objetivos que persigue la concesión de fondos europeos que recibió el Ayuntamiento para la financiación de este segunda fase de las obras. La aprobación de 1,8 millones de euros incluía una partida para impulsar una serie de acciones encaminadas a la digitalización comercial de la avenida, con la instalación de pantallas led, el impulso de nuevas campañas de promoción o la formación a comerciantes.
Aprobadas las dos próximas fases
Mientras culminan las obras en el tramo final de la avenida Barcelona, el Ayuntamiento de Mont-roig ya ha aprobado los proyectos para las dos siguientes fases de reurbanización de la antigua N-340. La tercera fase incluirá el tramo que va desde la plaza Tarragona hasta la calle María Cristina, mientras que la cuarta se centrará en la remodelación de la propia plaza Tarragona y el tramo sur de la avenida del Mar, para generar un enlace hacia el paseo Mediterrani, el futuro paseo de las calas y la vía verde en la que se debe transformar el futuro trazado del tren. Estas dos fases cuentan con un presupuesto de licitación que ronda los 7 millones de euros y el Ayuntamiento ya está explorando vías de financiación para poder ejecutarlas.
Mientras culminan las obras en el tramo final de la avenida Barcelona, el Ayuntamiento de Mont-roig ya ha aprobado los proyectos para las dos siguientes fases de reurbanización de la antigua N-340. La tercera fase incluirá el tramo que va desde la plaza Tarragona hasta la calle María Cristina, mientras que la cuarta se centrará en la remodelación de la propia plaza Tarragona y el tramo sur de la avenida del Mar, para generar un enlace hacia el paseo Mediterrani, el futuro paseo de las calas y la vía verde en la que se debe transformar el futuro trazado del tren. Estas dos fases cuentan con un presupuesto de licitación que ronda los 7 millones de euros y el Ayuntamiento ya está explorando vías de financiación para poder ejecutarlas.
